La actividad del narco siempre busca superar los obstáculos que se le opongan.
El Político
El número de tormentas tropicales, huracanes y otras causas naturales en el Mar Caribe ha obligado a los narcotraficantes a cambiar su “mercancía” de lugar.
Si el mal tiempo impide la llegada de lanchas rápidas, la única opción que queda es el envío aéreo para que la droga llegue a su destino, o lo más cerca posible.
Las costas mexicanas nunca han dejado de ser una opción para los grandes cárteles que operan en Sudamérica para lograrlo, reportó Alberto News.
Sin embargo, según las cifras reportadas por el Ejército y la Fuerza Aérea Mexicanos han sido 69 los decomisos e intercepciones que han hecho durante los casi dos años de gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
La Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), en ese periodo ha contabilizado junto a las 69 intercepciones, la incautación de 11.396 kilogramos de cocaína cargada en las narcoavionetas que han sido obligadas a aterrizar o han sido encontradas si su tripulación, pero con la droga en su interior abandonada.
A este número se suman también 2 toneladas de metanfetamina y casi 300 mil pastillas de fentanilo, la droga con mayor precio de todas y la más buscada y peleada en el mercado del narcotráfico en México.
Entre los últimos procedimientos ejecutados por el Ejército Mexicano fue la incautación de un cargamento de 21 kilos de fentanilo que estaban guardados en maletas deportivos el pasado 24 de octubre.
Según los cálculos de la SEDENA, este decomiso hubiese dejado al menos un monto de 8.3 millones de dólares de haber llegado a las calles.
Estos cálculos, señalan que un kilo de fentanilo ya procesado y listo para ser distribuido para su venta y uso alcanza en México un precio de 8.2 millones de pesos (cerca de 378.700 dólares).
