Las pequeñas y medianas empresas (PyME) de tecnología tienen un papel importante en la cadena de valor del Internet de las Cosas (IoT) al diseñar, integrar y adaptar las soluciones que responden a las realidades, el ecosistema y las necesidades de la región.
Por Paula Peláez/BID Invest
En el Día de las MiPyME recordamos el importante papel que estas desempeñan en nuestras economías y en el desarrollo sostenible. Las MiPyME (micro, pequeñas y medianas empresas) representan el 99% de las empresas y el 67% del empleo en América Latina y el Caribe.
Al mismo tiempo que buscamos apoyar el desarrollo del sector de Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) en nuestra región, no solo será importante trabajar para evitar la brecha digital. Necesitamos asegurarnos de que las PyME “tradicionales” puedan integrar soluciones digitales en sus modelos de negocios, o que puedan recibir una mejor atención a través de soluciones digitales. Para ello será indispensable reconocer también el importante rol y el potencial de las PyME tecnológicas para acelerar la digitalización y tener un impacto duradero en las economías de nuestra región.
Una forma de hacerlo es permitir que las soluciones de Internet de las Cosas transformen la forma en que hacemos negocios. A través de Internet de las Cosas, las compañías están obteniendo mejores perspectivas de los clientes, automatizando e incrementando la eficiencia en sus procesos, y mejorando sus productos y servicios. Al aprovechar el poder de la conectividad, las máquinas inteligentes y el análisis en tiempo real de grandes cantidades de datos, Internet de las Cosas informa de manera rápida y precisa las decisiones de negocios, e impulsa el valor de los negocios.
El rol de las PyME tecnológicas
Las pequeñas y medianas empresas (PYMES) de tecnología tienen un papel importante que desempeñar en la cadena de valor de Internet de las Cosas al diseñar, integrar y adaptar las soluciones que responden a las realidades, el ecosistema y las necesidades de la región. Esto quedó claro durante una Cumbre de Internet de las Cosas organizada por el BID Invest a principios de este junio en México, en marco del evento Mobile 360 Latin America de GSMA. La cumbre reunió a compañías de la región junto a compañías coreanas que compartieron la experiencia en un mercado más maduro de Internet de las Cosas.
Los participantes en la cumbre incluyeron empresas bien establecidas como G7net que, a través de su marca Giotrace, ofrece aplicaciones de Internet de las Cosas para mejorar la trazabilidad, la medición y el monitoreo. Por ejemplo, en transporte, Giotrace ofrece soluciones de gestión de flotas para monitorear en tiempo real y optimizar el mantenimiento de los vehículos con información enriquecida de cada vehículo conectado. Otra empresa, ITA, a través de su plataforma de Internet de las Cosas Synermetrix, ofrece soluciones para monitorear y administrar activos remotos de manera transversal, así como dispositivos biométricos de Internet de las Cosas para mitigar el fraude.
Otros participantes incluyeron compañías tecnológicas en etapa temprana, como Flatbox, que ofrecen soluciones en agricultura para monitorear las condiciones ambientales y brindar un seguro climático a los agricultores en asociación con los bancos locales.
De las discusiones con varias compañías participantes surgieron elementos comunes a todas: todas están preparadas para crecer y también representan una oportunidad de inversión, puesto que ofrecen soluciones innovadoras que irrumpen en las operaciones detodos los sectores con un gran potencial de crecimiento. A menudo, estas compañías ya se están asociando con grandes empresas de telecomunicaciones en la región. Del mismo modo, ya están aportando características innovadoras, se adaptan rápido a los cambios y atienden flexibilidad su compromiso con las grandes empresas en todos los sectores para incentivar, diseñar e implementar soluciones de Internet de las Cosas. En línea con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 9 (“construir infraestructura resistente, promover la industrialización inclusiva, y sostenible y fomentar la innovación”), estas empresas están aportando colaboración B2B (negocio a negocio) y contribuyen así a la innovación en todas las industrias mediante soluciones que están creando valor empresarial y social.
Ahora sabemos lo que se necesita para hacer de estas PyME algo mejor:
- Atención continua por parte de los gobiernos sobre el rol y el apoyo a las PyME tecnológicas, a medida que desarrollan sus agendas nacionales de Internet de las Cosas.
- Trabajar con intermediarios financieros para ofrecer financiamiento adecuado a PyME tecnológicas que tengan un crecimiento significativo.
- Trabajar con grandes empresas para lograr esquemas de innovación abierta que les permitan cooperar con las PyME tecnológicas para incorporar Internet de las Cosas en sus negocios y superar la resistencia interna al cambio. A su vez, las grandes empresas apoyan el crecimiento y el fortalecimiento de estas PyME tecnológicas dinámicas.
- Asegurar la atención continua a los problemas de seguridad, protección de datos y privacidad, no solo para impulsar la adopción de Internet de las Cosas de manera transaccional en la región; pero, lo que es más importante, garantizar que se cree un valor social, en lugar de agotarse.
Un estudio reciente de Bain and Company estima que, en todo el mundo, el mercado de Internet de las Cosas (que incluye hardware, software, integración de sistemas y servicios de datos y telecomunicaciones) crecerá a US$520 mil millones en 2021. Se espera un rápido crecimiento en el mercado de Internet de las Cosas en la región, particularmente en América del Sur, donde se proyecta que el mercado alcanzará los US$19,407.1 millones en 2023. Por su naturaleza, Internet de las Cosas permite y requiere interconectividad y cooperación.
Podría decirse que el poder real de Internet de las Cosas radica en su aplicación multisectorial, allí donde las soluciones conectan dispositivos de forma transversal y dan paso a una era de agricultura inteligente, al cuidado inteligente de la salud, al transporte inteligente, a la fabricación inteligente y a las ciudades inteligentes. Estas son algunas de las muchas otras formas en que podemos trabajar para integrar a las MiPyME en un mundo de soluciones digitales.■
SOBRE LA AUTORA:
Paula Peláez es jefa de PyME (pequeñas y medianas empresas) y negocios sostenibles de BID Invest. Ha sido jefa en Business Call To Action (BCtA), plataforma del PNUD para incentivar modelos negocios innovadores entre empresas del sector privado que incorporen retorno en la inversión con impacto en el desarrollo. Ha sido gerente de programa en CARE Canadá y gerente de servicios de asesoría en la consultora BSR (Business for Social Responsability) de San Francisco, California. Tiene una maestría en estudios medioambientales y desarrollo sostenible por York University y grado de ingeniería industrial por la Universidad de Los Andes.