4,4 millones de electores acuden hoy a un nuevo "proceso electoral", para elegir entre 6 aspirantes si repiten al actual mandatario Daniel Ortega, o asume uno de los otros 5 aspirantes para que gobierne Nicaragua por un quinquenio más.
Mario Augusto Beroes Ríos/El Político
Unas elecciones, por cierto, plagado de irregularidades, ventajismos, e intromisión oficial del partido gobernante, el sandinismo.
Media docena de fotos aparecen en la boleta electoral hoy 7de noviembre en Nicaragua. Uno de ellos gobernará ese pequeño país centroamericano por un quinquenio, hasta el 2027.
De los 6, solo una persona es conocida: Daniel Ortega. Los otros que han quedado en la contienda para enfrentar al mandatario son personas señaladas de ser “cómplices” de lo que muchos opositores tildan de “farsa electoral”.
Seis para un puesto en Nicaragua
En total son seis aspirantes a la silla presidencial del pobre país centroamericano, que atraviesa una de las peores crisis sociales y económicas, de manos de un movimiento político, que comenzó como una guerrilla para acabar con la dictadura de los Somoza, y que ha degenerado en una grotesca dictadura.
Los "candidatos" que aceptó el Tribunal Electoral para el proceso de hoy domingo 7 de noviembre son:
1. – Partido Liberal Constitucionalista
Walter Espinoza, de 41 años, actual diputado en la Asamblea Nacional, es candidato del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), una organización política que tuvo un gran respaldo antes del retorno al poder de Daniel Ortega en 2007, pero su popularidad cayó por escándalos de corrupción y denuncias de pactos políticos.
Espinoza logró inscribirse ante el Tribunal Electoral en medio de fuertes señalamientos hacia su partido, después de que su presidenta, María Haydeé Osuna, pidió la anulación de una importante agrupación política: el partido Ciudadanos por la Libertad.
2. – Camino Cristiano
Guillermo Osorno es un pastor evangélico que a lo largo de su historia política ha estado en diferentes bandos.
En los comicios pasados, el Partido Camino Cristiano, organización bajo la cual compite como candidato a la presidencia, se alió al Frente Sandinista de Daniel Ortega.
En esta ocasión dijo que valoraría una nueva alianza con el oficialismo porque estaba a la espera de “la guía de Dios” para tomar una decisión. Finalmente decidió postularse por separado como candidato.
No es la primera vez que Osorno ha sido aspirante presidencial del Camino Cristiano. Lo fue en las elecciones generales de 1996, cuando el presidente Arnoldo Alemán triunfó (1997-2002).
3. – Alianza Liberal de Nicaragua
Marcelo Montiel es el candidato de quien menos se conoce. Se presume que es notario público y ha dicho en las pocas entrevistas brindadas a medios que cursa dos maestrías.
Se inscribió en el Tribunal Electoral apoyado por simpatizantes que se ocultaban el rostro con las banderas y que, al igual que él, evitaban hablar con los medios.
Tampoco ha tildado de “dictadura” al gobierno de Ortega, como lo han hecho los siete precandidatos presidenciales que fueron arrestados en los últimos meses en Nicaragua.
Se molesta cuando se le pregunta si es “colaboracionista o zancudo”, como se le llama a los candidatos y partidos que han quedado en la contienda electoral actual.
4. – Alianza por la República (APRE)
Gerson Gasparín es quizás el candidato más conocido, pero no por su plan de trabajo, sino porque ha sido objeto de burlas en las redes sociales.
El presidente del partido Alianza por la República, APRE, Carlos Canales, partido en el cual fue inscrito Gasparín, amenazó a los medios de comunicación con procesarlos judicialmente por “difamar la imagen del candidato”.
Gasparín también es el candidato más joven de las elecciones en Nicaragua. Tiene 29 años, se ha autodenominado “milenial” y dice “tener similitud” con el presidente de El Salvador, Nayib Bukele.
Su selección como candidato presidencial en APRE, según el presidente del partido, Carlos Canales, “fue una iluminación del Espíritu Santo”.
El APRE ha sido señalado de ser uno de los partidos colaboracionistas al oficialismo. En los comicios pasados fue el partido que menos votos obtuvo.
5. – Partido Liberal Independiente (PLI)
Mauricio Orúe, de 53 años, es el candidato del PLI y también es diputado en la Asamblea Nacional de Nicaragua. Orúe es uno de los diputados a quienes Estados Unidos revocó su visa tras señalarlo de “ser cómplice de socavar la democracia”.
Orúe no aparece en las encuestas nacionales relacionadas a los más populares, al igual que los otros candidatos que se enfrentan en esta contienda a Ortega.
Estudió Derecho y Psicología Clínica, y además logró obtener una licenciatura en el país vecino de El Salvador como teólogo.
Hoy dice que espera “derrotar” a Ortega en los comicios generales, aunque su simpatía sea nula.
6. – Frente Sandinista de Liberación Nacional
Daniel Ortega ha sido el único candidato del oficialista Frente Sandinista y lleva más de la mitad de su vida como líder del mismo.
Ortega ha sido candidato presidencial del FSLN en ocho ocasiones consecutivas: 1984, 1990, 1996, 2001, 2006, 2011, 2016 y ahora en 2021.
Su candidatura actual ha sido polémica, pues si bien en ocasiones anteriores se le había señalado de ser un “dictador” y de querer “instaurar una dinastía familiar”, al nombrar a su esposa Rosario Murillo como su fórmula, ahora liquidó a la oposición, encarcelándola y despejando el camino para gobernar cinco años más en Nicaragua, según sus críticos.
Además del nombre de Daniel Ortega, en las papeletas habrá otros de “candidatos comparsa”, totalmente desconocidos para la ciudadanía en Nicaragua.
Así es como se conoce a los postulantes que surgieron de un día para otro y sin hacer ningún tipo de campaña para rellenar los espacios que dejaron los precandidatos apresados.
También se les conoce tradicionalmente como partidos “zancudos” porque, sabiendo que no tienen ninguna posibilidad de ganar, los líderes de estos partidos se postulan o postulan a algún allegado o miembro de su familia para obtener un escaño en el Estado y un reembolso económico por los votos recibidos.
De hecho, este año en la contrarreforma que aprobaron en mayo los magistrados electorales obedientes a Ortega eliminaron el techo mínimo del 4% que debían alcanzar los partidos políticos para ser sujetos de reembolsos.
Según la nueva ley, el Estado reembolsará a los partidos por la cantidad de votos recibidos, sin importar que estos representen un número insignificante.
En las últimas elecciones presidenciales de 2016, solo tres de estos seis partidos políticos “zancudos” alcanzaron más del 4% de los votos y otro participó en una alianza electoral con el Frente Sandinista.
Los 7 opositores arrestados en Nicaragua
Ortega, no ha ocultado su gusto dictatorial, desde los tiempos en que presuntamente combatió contra la dictadura de Anastasio Somoza, en los años 80. Con todo descaro y valiéndose de un Poder Judicial total y absolutamente servil, ha llevado a prisión a los principales oponentes a su continuismo político de ocho postulaciones electorales.
Los ocho ciudadanos detenidos y que osaron optar a disputarle eltriunfo electoral en Nicaragua son la periodista Cristiana Chamorro, hija de la expresidenta Violeta Barrios de Chamorro, la artífice de la peor derrota en las urnas de Ortega en 1990.
El politólogo Félix Maradiaga; el economista Juan Sebastián Chamorro; el líder campesino Medardo Mairena; el periodista Miguel Mora; el exembajador del sandinismo en Estados Unidos Arturo Cruz; y un viejo político que ha aspirado varias veces a la presidencia, Noel Vidaurre.
*Con la colaboración de VOA