El gobernador de California, Jerry Brown, otorgó el sábado un perdón a tres veteranos de guerra deportados a México, una decisión que facilita su proceso legal de cara a la obtención de la ciudadanía estadounidense.
Redacción El Político
La coalición Despedidos con Honores, Deshonorablemente Deportados (Honorably Discharged, Dishonorably Deported), calificó el hecho de histórico, dado que es la primera vez que un gobernador toma acción para "hacer frente a la injusticia de los veteranos deportados", reseña EFE.
A principios de año se había hecho la petición al estado de California para que los excombatientes Héctor Barajas, Erasmo Apodaca y Marco Antonio Chávez Medina obtuvieran el perdón, tras ser expulsados del país cuando cumplieron sus condenas carcelarias.
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"Estos veteranos sacrificaron su vida por defender al país y se les prometió total ciudadanía como parte de su servicio militar, ellos nunca debieron ser deportados", señaló veterano y líder de la coalición Nathan Fletcher.
Agregó que estos casos, incluidos en una resolución que otorga perdón a un total de 72 reclusos y siete conmutaciones de penas, "brinda esperanza a cientos de veteranos deportados que aún pelean por regresar a la nación a la cual sirvieron con honores".
Héctor Barajas, exparacaidista de la milicia norteamericana y director de un grupo de apoyo a veteranos deportados en Tijuana, México, expresó que "no hay palabras para describir la alegría" al enterarse del perdón recibido por el gobernador del estado.
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Barajas fue deportado tras haber cumplido una sentencia de dos años por haber estado en un automóvil cuando se detonó un arma.
Por su parte, Apodaca cumplió una sentencia por robo al ser encontrado en la casa de una exnovia, mientras que Chávez Medina fue sentenciado a dos años por crueldad animal, aunque salió antes por buena conducta.
Jennie Pasquarella, directora de derechos de inmigrantes de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), consideró que con el perdón el gobernador de California ha puesto fin al sufrimiento por destierro de los tres excombatientes.
"Ya han pagado el precio por sus errores, pero la deportación ha sido el mayor castigo al separarlos permanentemente de sus familias y del único país que conocen", dijo la abogada y representante legal de los tres veteranos deportados.