El canciller chileno, Heraldo Muñoz, con respecto a la disputa que existe sobre la salida marítima con Bolivia y la extensión del río Lauca, indicó que su par boliviano, David Choquehaunca, "vino a confrontarnos".
Maryann H. León / El Político
"En su visita confrontacional a Chile, ahora el canciller boliviano agrega declaraciones que escalan aún más las tensiones entre los dos países. Choquehuanca y otros miembros del Gobierno boliviano hacen apología de la violencia y hablan de ‘derramar sangre’ cuando, paralelamente, llaman al diálogo", subrayó.
Estas declaraciones las ofreció Muñóz, luego que el canciller de Bolivia asegurara que se "derramará sangre" de ser necesario.
"Cuando uno ve el Lauca le hierve la sangre. Tienen que ir al Lauca. Entonces, cuando estén ahí parados, van a decir: Estoy dispuesto a derramar sangre, a pelear para recuperar lo que es nuestro, para reclamar nuestro derecho", sostuvo el jefe de la diplomacia boliviana, quien además responsabilizó a Chile de desviar el río Lauca.
Ante estas declaraciones, el canciller chileno dijo que su par boliviano, David Choquehuanca, "está yendo demasiado lejos", al hablar de estar dispuestos a derramar sangre para recuperar lo que, a su juicio, Chile le ha robado a su país.
"Un canciller mínimamente responsable no puede decir lo que ha afirmado Choquehuanca. Está yendo demasiado lejos", dijo en Santiago el canciller Muñoz al ser preguntado por medios locales.
El Lauca
El Lauca es un río internacional que nace en Chile y discurre hacia territorio boliviano. Tras denunciar el desvío de sus aguas en 1962 Bolivia rompió sus relaciones con Chile a nivel de embajadores, sin que se hayan vuelo a reanudar, salvo un breve paréntesis entre 1975 y 1978.
Las autoridades chilenas aseguran que la utilización del Lauca llega al 20 por ciento de su cauce y que el resto corre hacia territorio boliviano.
Durante su estancia en Chile, Choquehuanca estuvo en el río y después el Gobierno boliviano dijo que Chile desvía 600 metros cúbicos por segundo del cauce.
Choquehuanca, en la entrevista con Pagina 7, reiteró también que el Gobierno de Bolivia quiere resolver sus diferencias con Chile mediante el diálogo: "Nuestro gran deseo es resolver los problemas de manera bilateral, pero en algunos temas no se puede debido a la negativa de Chile", manifestó.
Al respecto, el canciller chileno comentó que "Nadie les cree. Lo del Gobierno boliviano es un monólogo inconducente. Chile seguirá velando por sus intereses con decidida firmeza y serenidad, por la vía de la resolución pacífica de las controversias".
El Gobierno boliviano presentó en 2013 una demanda ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya en busca de un fallo que obligue a Chile a negociar en firme la centenaria reclamación de la restitución de su acceso soberano al Pacífico perdido en una guerra en 1879.
Y en marzo pasado, el presidente boliviano, Evo Morales, anunció que su país presentaría una segunda demanda ante la misma corte para protestar por lo que considera un uso "abusivo" por parte de Chile de las aguas del Silala, que para Bolivia son manantiales que discurren hacia territorio chileno mediante canales construidos en 1908.
No obstante, Chile se adelantó e interpuso en junio pasado una demanda para defender que el Silala es un río de cauce internacional y que, por tanto, tiene derecho a su aprovechamiento.
Con información de El Correo