La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena descalificó las afirmaciones de la empresa Smartmatic por denunciar manipulación en los resultados de las elecciones para la Asamblea Nacional Constituyente.
El Político
El director ejecutivo de la compañía, Antonio Mugica, anunció que su sistema automatizado está diseñado para evidenciar cualquier manipulación al asegurar la diferencia entre la cantidad presentada por el CNE y la que arroja el sistema, la cual según sus declaraciones es de al menos un millón de votos.
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Mugica advirtió que para poder comprobar el fraude electoral deben realizar el proceso de auditoría para corroborar los resultados, misma auditoria de la cual hacía referencia Lucena en la entrevista concedida en diciembre de 2012 al periodista José Vicente Rangel.
En el minuto 3:22 de la entrevista Lucena hace referencia a la confiabilidad del sistema electoral venezolano que desde entonces recibía los servicios de Smartmatic. “La credibilidad del CNE, se basa en las garantías que damos a través de la auditabilidad del sistema electoral” dijo la rectora.
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Cabe destacar que para las elecciones del pasado domingo 30 de julio, la oposición no participó en la auditoria, es decir, no hubo testigos suficientes para constatar los resultados.
"Es un terremoto a nivel mundial, porque lo que se venía diciendo a gritos viene a tener confirmación completa. Smartmatic ha declarado que tiene la data dura incontrovertible según la cual las elecciones de la Constituyente no fueron sólo un fraude por la convocatoria, sino que todos los resultados que leyó el CNE esa noche son absolutamente fraudulentos" insistió el ingeniero Mugica.
Desde 2004 Smartmatic ha ofrecido a Venezuela sus servicios tecnológicos de votación, garantizando un sistema crédulo y confiable.
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Con las recientes declaraciones, la rectora muestra un discurso contradictorio al exaltar en 2012 un sistema que priorizaba las auditorias como garante de transparencia, mientras que para la reciente fecha solo muestra una respuesta totalitaria ante el llamado a un escrutinio “al mejor sistema electoral del mundo” como ella misma ha calificado.