El gobierno colombiano creó el Grupo Migratorio Especial (GEM) para dar una solución a los venezolanos que ocupan espacios públicos en el país. Sin embargo, la solución no ha podido resolver la situación de los indios Yukpa que continúan en condiciones de indigencia en las calles y avenidas.
“Ellos mantienen ocupado un predio en inmediaciones al puente Francisco de Paula Santander, en límites entre Cúcuta y el municipio Pedro María Ureña. Allí, con niños y bebés recién nacidos, conviven desde hace meses entre la miseria y el olvido”, así lo reseñó La Opinión.
Ante estos casos, las entidades que conforman el GEM y demás autoridades como: Policía, Cancillería, Migración Colombia, Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), Alcaldía y Gobernación, le han dado un trato especial a esta comunidad que se resiste a retornar a Venezuela, argumentando que en el país vecino tienen mejores condiciones de vida.
“Más de tres veces los hemos devuelto a Venezuela por Puerto Santander, pero regresan. Este asunto se está complicando cada vez más y por eso vamos a tener una reunión de carácter urgente”, dijo Muñoz.
Frente a este panorama, ninguna de las entidades que conforman el GEM, entre otras, Policía, cancillería, Migración Colombia, Instituto Colombiano de Bienestar Familias (Icbf), Alcaldía y Gobernación, le ha dado un trato especial a esta comunidad que se resiste a retornar a Venezuela bajo el argumento de que aquí están mejor.
Las autoridades han determinado que en el barrio El Escobal se asientan unas 109 familias, de ellas, lo que más preocupa es que hay alrededor de 146 niños , casi la mitad de ellos con enfermedades respiratorias, en la piel y estomacales. Unas 9 madres gestantes están a punto de parir.