Ya, seguir allí, en el Palacio de Miraflores, en la Asamblea Nacional Constituyente, es una victoria. Ya seguir allí, en el poder, es una victoria. Pocos lo creen, pero Nicolás Maduro y Diosdado Cabello piensan con la lógica del desafío.
El Político
Los cuestionados líderes del supuesto proceso socialista no descansarán hasta sacar a Guaidó del juego, ahora van por la Asamblea Nacional y en su "burbuja" se creen victoriosos.
Juan Carlos Zapata analiza en AlNavio, las últimas actuaciones del gobierno de Maduro. Según Zapata Nicolás Maduro y Diosdado Cabello han transformado la consigna inpuesta por Hugo Chávez "No volverán" en "La derecha no volverá a gobernar a Venezuela".
Para Diosdado Cabello, este tránsito es más sencillo. "Lo más difícil era que Chávez ganara el poder, confesó en un mitin de este fin de semana". Confirma así la premisa de otros movimientos similares al chavismo: Ganar en democracia y no soltar más nunca el poder.
Hugo Chávez impuso otra consigna: "Venezuela es de todos, PDVSA (Petróleos de Venezuela) es de todos, la riqueza es de todos". La verdad es que la consigna era: Venezuela es nuestra. La riqueza es nuestra. El chavismo, con Chávez, con Nicolás Maduro y Diosdado Cabello hacen lo que el castrismo en Cuba: Venezuela es nuestra.
La élite chavista dice: Venezuela es tierra libre, soberana, independiente. Es nuestra. Nosotros la liberamos. La élite chavista está decidida a vivir en ese territorio. Dicen que les importa poco el resto del mundo.
Un boliburgués sancionado dijo: "Viviré en Caracas y viajaré cada cierto tiempo a la Isla de Margarita". También se hizo de una hacienda en el llano.Vive rodeado de guardaespaldas. Come bien, bebe los mejores vinos, se viste bien. En su casa de Caracas hay un cuarto con bolsas negras llenas de dólares. Esta es una regla para los funcionarios y boliburgueses chavistas.
Venezuela es el búnker. Venezuela es, sobre todo, el coto del poder, donde ejercen el poder. Las élites venezolanas le entregaron el poder a Chávez. Y Chávez le entregó el poder a la élite chavista.
No necesitan negociar
Cabello dice que están obligados a preservar el poder que les entregó Chávez. El poder es nuestro, la patria también.
Testigos de las interioridades de la élite chavista dicen que los dirigentes prefieren el sacrificio a la entrega del poder. No son testigos cualesquiera. Son expresidentes. Son exministros. Gente con experiencia del poder. De eso saben. Si hubieran querido negociar, lo hubieran hecho en 2016 cuando estaban acorralados.
La élite chavista, dicen los testigos, prefiere morir con las botas puestas. Pese a los testimonios, pese al comportamiento de todos estos años, todavía en la oposición se resisten a creerles. No le creen a Diosdado Cabello cuando dice que si llegan los marines no van a salir corriendo.
No le creen que, si hay una invasión militar, entrarán los invasores, pero no se sabe cuándo saldrán. No le creen cuando dice que no hay nada que negociar.
No les creen cuando Maduro y Cabello desafían al entorno continental, y lo desafían protegiendo al ELN. Protegiendo a las FARC, antes, y a los disidentes de las FARC, ahora.
No les creen cuando hablan de antimperialismo o de lucha de clases. Los testigos dicen: Ya no es Cuba la que ordena. Cuba ayuda. Pero son ellos los que deciden.
Otros olvidan que llevan 20 años en el poder. Que ya aprendieron los resortes del poder.Otros olvidan que han sobrevivido. Y que apuestan a seguir sobreviviendo. Con los que queden en Venezuela. sin compartir el poder. El poder es nuestro.
Porque lo primero es el poder. El poder son ellos, sólo de ellos y para ellos.