Los votantes del estado de Iowa darán este lunes el pistoletazo de salida al proceso de primarias en EEUU.
El Político
Una carrera de fondo que hará una escala en julio para los demócratas y en agosto para los republicanos, con sus respectivas convenciones, para culminar con las elecciones presidenciales del 3 de noviembre.
Estos son los protagonistas de la pugna para disputar a Donald Trump la Presidencia del país.
Joe Biden
"Sleepy Joe" (Joe el dormilón), como le llama despectivamente Trump, llega a los "caucus" como el líder en intención de voto en los comicios de noviembre, según la media de sondeos nacionales que elabora la página especializada Real Clear Politics. Sin embargo, las encuestas para Iowa lo colocan en los resultados por detrás del senador por el estado de Vermont Bernie Sanders.
El que fuera vicepresidente de Barack Obama (2009-2017) ha hecho gala de su imagen de moderado para reforzar la idea de que es el único progresista capaz de recuperar el electorado perdido en los comicios de 2016. Biden ha sido foco de ataques de Trump, que en julio supuestamente pidió a su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, que lo investigara junto a su hijo Hunter por presunta corrupción en Ucrania; un hecho por el que el presidente enfrenta actualmente a un juicio político en el Senado.
Bernie Sanders
De las supuestas afirmaciones machistas a la también precandidata demócrata Elizabeth Warren a la insistencia en saludar de mala gana a otro aspirante, Tom Steyer, Sanders no ha estado exento de polémica en esta campaña. Sin embargo, parece que este año tiene mucho más cerca que en 2016, cuando fue derrotado por la exsecretaria de Estado Hillary Clinton, acabar siendo el nominado demócrata para los comicios presidenciales de noviembre.
Líder en las encuestas de Iowa, donde perdió en 2016, una victoria el lunes podría facilitar al senador por Vermont la tarea de recortar los 5,4 puntos de ventaja que le saca Biden en los sondeos nacionales. En su contra juegan su imagen de arisco y unas políticas quizá muy a la izquierda para el estadounidense medio, como la creación de un sistema sanitario público de pagador único.
Elizabeth Warren
La senadora por Massachusetts se ha vendido como la candidata que tiene un plan para todo. Cuarta clasificada en las encuestas de Iowa y tercera en las nacionales, ha luchado toda la campaña por desmarcarse de Sanders -con el que comparte muchas políticas-, hasta el punto de acusarle de haberle asegurado en privado que una mujer no podía ser presidenta de EE.UU.
A 13 puntos de Biden en el conjunto del país, las perspectivas de Warren son muy diferentes a las que tenía en octubre, cuando incluso llegó a colocarse primera en los sondeos gracias a sus políticas progresistas, como la cancelación completa del 75 % de las deudas de los estudiantes universitarios y su fuerte apoyo a los sindicatos.
Pete Buttigieg
Alcalde de South Bend (Indiana), exmilitar, joven -es el benjamín de los candidatos con sus 38 años- y posible primer presidente gay. Así se muestra este devoto cristiano que forma parte del ala moderada del partido.
Buttigieg esgrime su falta de experiencia en la política de Washington como un soplo de aire fresco y no como una debilidad. Aún así, este teniente retirado de la Marina ha demostrado tener problemas para atraer el voto de las comunidades latina y afroamericana.
Debido a la erupción de millonario Michael Bloomberg, ha sido relegado al quinto puesto en las encuestas a nivel nacional, por lo que se encomienda a unos buenos resultados en Iowa, donde las encuestas le colocan como tercero, para ganar impulso en esta larga carrera.
Michael Bloomberg
A día de hoy es difícil que exista un estadounidense que no haya visto un anuncio de Michael Bloomberg en la televisión, el ordenador o la pantalla de su móvil. El exalcalde de Nueva York (2001-2013) y multimillonario se presentó en noviembre a las primarias demócratas como la persona que acude a una fiesta en la que nadie le espera ni quiere. A pesar de haberse incorporado tarde a la carrera, este filántropo ya ha batido el récord de gasto en una campaña, con más de 250 millones de dólares.
Bloomberg, que no participa en las primarias de Iowa y New Hampshire, se presenta como un candidato moderado poseedor de una "condición única" por su "experiencia en los negocios, gobierno y filantropía", que le permitirán "ganar y liderar". De momento, ha ascendido meteóricamente en las encuestas nacionales, en las que ya es el cuarto clasificado.
El resto de los demócratas
Un gran número de demócratas han llegado vivos a la votación de este lunes, aunque parte de ellos están ya medio moribundos: Algunos, como el empresario Andrew Yang, que recoge un 4,3 % de la intención de voto a nivel nacional, y la senadora Amy Klobuchar (4,1 %) esperan conseguir en Iowa el impulso necesario para una remontada.
Mientras, el multimillonario Tom Steyer (1,9 %), la congresista Tulsi Gabbard (1,4 %), el senador Michael Bennet (0,5 %) y Deval Patrick (0,3 %) parecen estar viviendo las postrimerías de sus campañas.
Los republicanos
Los tres únicos candidatos que se enfrentarán al presidente en las primarias republicanas, Rocky De La Fuente, Joe Walsh y Bill Weld, parecen haberse embarcado en un pugna cuyo ganador se conoce desde el principio: Donald Trump.
Tan muerta nació la carrera por ser el próximo nominado republicano en los comicios de noviembre que el partido ni siquiera ha convocado un debate e incluso se ha cancelado la votación en seis estados.
Fuente: Elconfidencial