Las grandes policías desconocen quiénes podrían matar a otros por prejuicios, duelos o motivos políticos. "Cerca de la mitad" de las personas que cometen este tipo de actos "no están fichados por la policía", subrayó el responsable de la policía criminal, Holger Munch. Esto aumenta la dificultad de localizar e identificar a tiempo a los sospechosos.
El Político
Su vecino podría ser un asesino. Esa persona que pasa horas en su computadora tratando de calmar en las redes a sus demonios interiores.
El ministro federal del Interior, Horst Seehofer, anunció este viernes (21.02.2020) una mayor presencia policial en Alemania después del atentado del miércoles. "Los hechos de Hanau son inequívocamente un ataque terrorista con motivación racista", dijo el político de la CSU durante una rueda de prensa conjunta con otros altos cargos políticos en Berlín. Es "el tercer ataque terrorista de derecha en pocos meses, la amenaza del extremismo de ultraderecha, antisemita y racista es en Alemania muy alto", continuó Seehof
Junto a la ministra federal de Justicia, Crhistine Lambrecht, el Fiscal General y el director de la Oficina Federal de Policía Criminal (BKA), Seehofer anunció un aumento de "la presencia policial en todo el país". "Vamos a aumentar especialmente la vigilancia en instalaciones sensibles, especialmente también las mezquitas", dijo el ministro del Interior, aunque también se refirió a "estaciones de tren, aeropuertos y zonas fronterizas".
"Desde los atentados de la Clandestinidad Nacional Socialista (NSU), pasando por la matanza de Múnich, el asesinato de Walter Lübcke y llegando a los crímenes de Hanau el terrorismo de ultraderecha ha venido dejando una huella de sangre en nuestro país", dijo Seehofer. "La ultraderecha es la máxima amenaza que tenemos en Alemania", insistió el ministro, "no acepto la idea de que no se pueda hablar de terrorismo de ultraderecha porque el asesino estaba loco, su motivación fue claramente racista y venía de alguna parte".
Seehofer se quejó de que las declaraciones de líderes de la AfD contribuyen a alimentar el odio. Y se refirió en concreto a las declaraciones en que un líder de esa agrupación calificó a la época nazi de una "cagarruta de pájaro’ en mil años de historia alemana".
"Tenemos que dejar claro cuáles son los límites en un estado de derecho. La libertad de expresión es un bien muy valioso pero hay que mostrar donde esta termina y empieza un campo delictivo", dijo. "Ponerle a un alcalde un patíbulo en el jardín no es expresar una opinión, es una amenaza", agregó.
Control de armas
La ministra de Justicia, Christine Lambrecht, dijo, por su parte, hay que combatir el caldo de cultivo que favorece el florecimiento del odio y recordó que el Gobierno acaba de aprobar un proyecto de ley para intensificar la lucha contra la instigación al odio racial. Lambrecht prometió que el gobierno "examinaría de manera minuciosa" la manera en que los extremistas pueden llegar a poseer armas, como era el caso del agresor de Hanau, que asesinó a nueve personas antes de matar también a su madre, con la que convivía, y de suicidarse.