En diciembre cuando empezó la epidemia del Coronavirus de Wuhan parecía una realidad muy lejana para los habitantes de Venezuela, ahora este microorganismo -que representa la muerte silente para los más vulnerables- está cada vez más cerca del país petrolero.
El Político
Con casos confirmados del nuevo brote de coronavirus que desencadena la enfermedad de Covid-19 en Brasil, Ecuador, México, República Dominicana y varias islas del Caribe, los venezolanos han comenzado a preocuparse por este microorganismo que ha ocasionado más de 3.300 muertes en todo el planeta.
Uno de los aspectos que más preocupa es que ante posibles focos de contagio, un escenario factible es que existan nuevas oleadas migratorias hacia Colombia, destacó eltiempo.com.
No obstante, muchos no se preocupan por la nueva cepa del coronavirus de Wuhan debido a que existe una gran desinformación, otros conocen la realidad pero no tienen tiempo de ocuparse de otro problema cuando su día a día es abastecerse de alimentos, gasolina e incluso medicinas debido a las graves carencias que existen por la terrible crisis asistencial en que la dictadura de Maduro sumió a Venezuela.
Cabe destacar que la Academia Nacional de Medicina indicó que es muy bajo el riesgo de la llegada del covid-19 -que genera afecciones respiratorias- a Venezuela, pero la posibilidad existe y está latente.
El virus va a entrar en todas partes
Para el médico pediatra, epidemiólogo, y profesor de la Universidad Central de Venezuela, Luis Echezuría, quien fue entrevistado por eltiempo.com, “El virus va a entrar en todas partes. No hay forma de detenerlo", no obstante se debe mantener la calma y estar informado de lo que ocurre.
Lamentablemente en un ámbito sanitario como el que existe en Venezuela, con carencias de todo tipo de insumos,e inclusive de algo tan vital como el agua en los diversos centros de salud del país, el ministro de Salud del régimen de Maduro, Carlos Alvarado, tampoco ha hablado de protocolos a seguir en caso de la llegada de la nueva cepa del coronavirus de Wuhan.
De hecho, Carlos Alvarado, sólo ha declarado que las medidas que se han tomado es la vigilancia epidemiológica en puertos y pasos fronterizos, y la supuesta llegada de reactivos para hacer el análisis al Instituto Nacional de Higiene, pero no siquiera ha dado la información de cuales serían las medidas que debe tomar la ciudadanía o a dónde dirigirse si una persona presenta síntomas. de reactivos para hacer el diagnóstico, no se ha orientando a la población.
Régimen a la deriva
En todo el planeta se sabe que el brote del coronavirus empezó el pasado mes de diciembre, y debido a la rápida expansión de la epidemia, se encendieron las alarmas en todos los países del orbe desde el año pasado.
Fue tan solo el jueves cuando el dictador, Nicolás Maduro, instaló una comisión presidencial para atender la situación del coronavirus.
Maduro -haciendo gala de su ignorancia- declaró, “Vamos a iniciar una campaña para saber qué es el coronavirus y tomar todas las medidas preventivas en las casas, las escuelas, los trabajos y las calles”.
En esa rueda de prensa también nombró a la vicepresidenta Delcy Rodríguez encargada de la comisión. al parecer las estrategias que se deben seguir se dirán este viernes.
No obstante en las usualmente vacías farmacias de Venezuela, no hay ni mascarillas ni gel antibacterial.
Vacío gubernamental, otros sectores informan a la población
Según el médico cirujano y presidente de la Ong, Médicos Unidos de Venezuela, Jaime Lorenzo, “Desde hace una o dos semanas, el Gobierno, por intermedio del Ministerio de Salud, debería estar orientando, formando y educando a la gente sobre la enfermedad para darle tranquilidad a la población”, destacó eltiempo.com.
Debido a que el régimen de Nicolás Maduro no ha dado ningún tipo de información sobre el coronavirus y que hacer ante un posible contagio, personal del sector salud asumió ese papel y empezó a informar a una población que está totalmente desprotegida y desprevenida ante este mortal microorganismo.
También en el ámbito educativo, los maestros y profesores se han dedicado a concientizar a los ciudadanos, informándole a los niños sobre los síntomas de los cuadros gripales y como evitar contagiar a otros, y solicitándole a los padres y representantes que no lleven a sus hijos a las escuelas si presentan problemas gripales o respiratorios.
También algunos ciudadanos han comprado equipos a motus propio para protegerse de una eventual llegada del virus de Wuhan, no obstante no se consigue ni mascarillas ni gel antibacterial.
Hospitales sin insumos
El profesor, pediatra y epidemiólogo, Luis Echezurría aseveró que “En recursos humanos, nuestros médicos están muy bien capacitados; lo que no existe es una dotación oportuna y suficiente de los centros hospitalarios a nivel primario y en los casos que haya que hospitalizar”.
Según el coordinador de la Encuesta Nacional de Hospitales y miembro de la coalición local Médicos por la Salud, doctor Julio Castro, "en un estudio se detectó que 51% de los hospitales de Venezuela no tienen ni mascarillas ni tapabocas en sus áreas de emergencia; además el 90% no poseen un protocolo de manejo clínico de pacientes con enfermedades de transmisión respiratoria y que ninguno tiene unidades de aislamiento en áreas de emergencia".
El 60% de los centros de salud pública no tienen agua, o tienen agua apenas una o dos veces por semana.
“Todas esas claves dan un signo muy negativo de cómo pudiera ser el impacto de un virus como este en nuestro país”, concluye Castro.
Según el profesor Castro y otros expertos en el área, en una situación de epidemia -como sufren algunos países del mundo- el personal de salud de los hospitales públicos sería el más expuesto, ya que ni siquiera poseen equipos de protección de alto nivel.
Adicionalmente, ni las camareras ni aseadoras cuentan con los implementos necesarios para limpiar los pisos de forma regular, tampoco tienen guantes para protegerse. El personal de emergencia y de las áreas críticas de los hospitales tampoco tienen insumos para protegerse, ni material de bioseguridad para atender cualquier emergencia que llegue al país, aseguró el médico cirujano Carlos Lorenzo.
El presidente de la Federación Médica Venezolana, Dr. Douglas León Natera, comentó que hace una semana una persona fue trasladada a un hospital en el estado Carabobo, (centro de Venezuela), con síntomas "extraños", aunque, aseguró no se había confirmado que se tratase del virus.
Sin embargo, León Natera advirtió que la persona con una supuesta enfermedad respiratoria "no tenía ni un tapaboca para evitar un contagio". Exigió al régimen chavista afrontar con seriedad la amenaza.
Este jueves, el ministro de Salud declaró en la televisora del Estado que se está reuniendo con directores de instituciones educativas porque “Hay un plan de acercamiento a las escuelas, al transporte público para dar información a la colectividad, sobre que es el coronavirus, saber cómo actuar, dónde acudir en caso de que se llegue a presentar algún caso sospechoso. Agregó que la información es importante para mantener la calma”.
Pero el flamante ministro no dijo que era el virus, ni cómo se debía actuar, ni nombró los lugares a dónde acudir en caso de sospechar de la enfermedad, es decir el régimen de Maduro continúa teniendo a la población desinformada de un virus que tiene más de 90 mil personas contaminadas en todo el mundo.
Estragos con enfermedad vírica respiratoria
El sociólogo y especialista en seguridad alimentaria, Édison Arciniega, fue entrevistado por eltiempo.com y comentó "una nueva oleada migratoria hacia Colombia sería tremenda, pues nosotros tenemos, aparte de las consideraciones sanitarias, a 8 millones de personas con hambre avanzada, y la primera consecuencia de inseguridad alimentaria severa o moderada es la inmunosupresión".
Arciniega explicó, "Es decir, tenemos 8 millones de personas con algún nivel de inmunosupresión, y una enfermedad vírica respiratoria puede hacer estragos si entra a Venezuela".
Según el sociólogo esto implicaría que Venezuela "tendría un índice de infección hasta cinco veces más alta que en sociedades más estables", y en “materia de mortalidad, al llegar a un país con una situación humanitaria compleja, su letalidad podría ser hasta 10 veces superior”.
Mientras, en Colombia previniendo una oleada migratoria expuesta al coronavirus, el director de Migración de ese país, Juan Francisco Espinosa aseveró que tendrán en los puentes fronterizos, “cámaras térmicas que pueden medir la temperatura de las personas en movimiento y generan una alerta que activaría los protocolos de salud”.