Después que Joe Biden aseguró que Rusia no estaba involucrada en el ciberataque perpetrado contra Colonial Pipeline, el cual ocasionó el cierre del oleoducto más importante de la costa este de Estados Unidos, corrigió su declaración. El presidente de EE.UU. aseguró: El ciberataque a Colonial Pipeline vino de Rusia
El Político
Pese a los temores iniciales, el pasado jueves el presidente, Joe Biden, aseguró que no existían pruebas alguna de que Rusia estuviese detrás del ciberataque a la red de Oleoductos Colonial Pipeline.
Esta empresa se encarga de transportar más de 2,5 millones de barriles diarios. Esta cantidad equivale al 45% del suministro de diésel, gasolina y combustible que consumen los aviones de la costa este de EE.UU. Además generó un aumento del precio de la gasolina en el país.
De hecho, por esa razón no canceló su encuentro con Vladímir Putin, previsto para el próximo mes de junio.
¡Biden corrigió! "El ciberataque a Colonial Pipeline vino de Rusia"
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó este jueves que el ciberataque que dejó fuera de juego varios días a la mayor red de oleoductos del país provino de Rusia, aunque descartó que el Gobierno de Moscú esté detrás.
Sin embargo, al día siguiente el primer mandatario estadounidense declaró a los medios de comunicación en la Casa Blanca, que tienen "fuertes razones" para creer que los piratas informáticos viven en Rusia.
Destacó que su Ejecutivo tiene "comunicaciones directas" con el Gobierno de Rusia. El objetivo es que Moscú actúe contra los hackers.
Biden se reunirá con Putin
Asimismo, Biden informó que "tiene intención de hablar con su homólogo ruso, Vladímir Putin, sobre la necesidad de actuar frente a los ciberataques", reportó Telemundo.
"Estamos trabajando para intentar llegar a un punto donde tengamos una especie de estándar internacional para que los Gobiernos que sepan que hay actividades delictivas en su territorio actúen", indicó Biden.
EE.UU. creó grupo de trabajo para perseguir hackers
Biden destacó que el Departamento de Justicia de EEUU creó un grupo de trabajo dedicado a perseguir a los hackers que emplean ransomware.
Ese es un programa que bloquea el acceso a la información a cambio del pago de una recompensa para liberarlo, justamente fue el empleado por los piratas cibernéticos para atacar la red de oleoductos Colonial Pipeline.
FBI: ¡DarkSide responsable del hackeo a la red de oleoductos Colonial!
El 11 de mayo, el FBI confirmó que el grupo criminal DarkSide fue el responsable del ciberataque a la mayor red de oleoductos de Estados Unidos.
A través de su cuenta en Twitter, el FBI confirmó la responsabilidad de DarkSide, un grupo con sede en el este de Europa, del ataque a Colonial. Al respecto escribió:
“El FBI confirma que DarkSide es responsable del cibersecuestro de datos que comprometió a la red de oleoductos Colonial Pipeline. Continuamos trabajando en la investigación con la compañía y nuestros socios en el Gobierno”.
Colonial reanudó sus operaciones el miércoles
El pasado miércoles, Colonial anunció la reanudación de sus operaciones, no obstante, advirtió que pasarán varios días para que el flujo del suministro vuelva a la normalidad en toda la costa este de EE.UU.
Biden declaró que la situación se normalice en los próximos siete días.
"Esperamos que la situación comience a mejorar hacia el fin de semana y principios de la próxima, con el retorno completo de los suministros de gasolina", manifestó el actual inquilino de la Casa Blanca.
E primer mandatario estadounidense insistió que las personas no se dejen llevar por el pánico y no acaparen combustibles en casa.
Aumentó el precio de la gasolina y poco a poco vuelve la normalidad
Por su parte, el jueves, Colonial informó en un comunicado que los trabajos para reanudar el flujo total en la red de oleductos avanzaban y que hacia el mediodía todos los mercados a los que sirven recibirían suministro.
La red de oleoducto de Colonial Pipeline proporciona combustible al 45 % del mercado de la costa este de EEUU, y transporta diariamente 2.5 millones de barriles de gasolina, diésel y combustible de aviación desde las refinerías del golfo de México al sur y el este de EEUU.