La inflación de Estados Unidos (EEUU) aumentó el pasado mes de abril a 4,2%, según el reporte del Departamento de Trabajo de Estados Unidos. Se trata del mayor aumento interanual de la inflación desde 2008, en medio de una recuperación económica de la pandemia y de buenos augurios de la FED (Reserva Federal).
El Político
Frente a esas cifras, que en un primer momento preocuparon a los mercados y encendieron las alarmas sobre posibles acciones de la FED, una publicación del portal Serenity Markets recordó el cambio en el cálculo del índice de precios al consumidor realizado en la la década de 1980-1990 que debería preocupar al banco central estadounidense.
Este medio señala que en ese momento se realizó la modificación para que la cifra de inflación fuera menor a la real; cálculo que se mantiene hasta la fecha. Según la metodología anterior, la inflación del mes de abril superaría el 8%, dato que respalda en un par de gráficos de Shadow Stats.
De acuerdo con esta publicación, si se utiliza el método anterior, el desempleo se ubicaría actualmente por encima del 25% y la inflación superaría el 10% con tendencia al alza, cifra que, según Serenity Markets, debería preocupar a la FED.
La actuación de la FED
Un artículo del diario El Cronista, por su parte, destaca el récord de emisión monetaria que registra la FED, especialmente por la pandemia. Este medio explica que esta emisión generó un proceso de hiperinflación de activos financieros en en el que las criptomonedas son un ejemplo notorio pero no el único.
Según este análisis, la caída de la semana pasada en el mercado de criptomonedas es una muestra de que estos activos están generando una burbuja.
"El mercado entero de activos financieros es hoy en día la contracara de una hiperinflación del dólar que no se percibe contra activos tradicionales como podría ser un alfajor o un televisor sino contra algo mucho más peligroso: activos financieros", dice el artículo de El Cronista.
La estrategia de la FED frente a este escenario es mantener las tasas bajas; y junto a las expectativas busca frenar una posible burbuja que no necesariamente tiene que implosionar. Con las tasas de interés bajas, la FED extermina el mercado de bonos como alternativa de inversión; obligando a los inversionistas moderados a invertir en acciones, commodities, real estate o criptomonedas bajo la asunción de riesgos muchísimo más elevados.
Se trata de una estrategia de la FED que lleva adelante desde la crisis de 2008. En medio de la pandemia los stoks monetarios se mantienen estables y las expectativas ayudan a ganar tiempo; pero se trata de distorsiones monetarias que afectan el equilibro general y promueven un "experimento monetario" cuya rapidez supera al de la crisis de 2008.
"La contracara de todo esto es la generación de burbujas en mercados financieros como commodities, acciones, real estate y cryptos. Los próximos años nos mostrarán si este mercado podrá desarmar las burbujas del 2021 mejor de lo que pudo hacerlo con las del 2006″, concluye el análisis El Cronista.