Las fuerzas del orden francesas han detenido a 293 personas desde comienzos de año por su presunta vinculación con redes yihadistas, indicó hoy el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, que habló del desmantelamiento de la última de esas redes esta misma semana.
Esa cifra ha subido significativamente en los últimos días, ya que hasta hace dos semanas se llevaban contabilizados 260 arrestos, hizo notar Cazeneuve en declaraciones a la prensa durante un desplazamiento a Châteauroux para participar en un congreso de protección civil.
Destacó igualmente que el desmantelamiento de esas estructuras terroristas significa que así se han impedido otros tantos atentados, aunque a continuación puntualizó que "eso no quiere decir que lo evitaremos todo".
"Estamos en una situación extremadamente intensa" y "obtenemos resultados", pero "no hay que relajar (la) vigilancia", explicó.
Advirtió de que los terroristas utilizan para no hacerse notar sistemas de comunicación codificados y "múltiples medios de telefonía para escapar a la vigilancia" de los servicios secretos, e igualmente de que pese a toda la vigilancia que se ponga, eso no quiere decir "riesgo cero".
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Siete personas, de las cuales cinco mujeres, seguían bajo arresto esta mañana en relación con un atentado fallido la madrugada del domingo pasado mediante un coche abandonado a pocos cientos de metros de la catedral Notre Dame de París con unas bombonas de gas y unas botellas de combustible que finalmente no explotaron.
Esta misma tarde se espera que sea presentada ante un juez antiterrorista con vistas a su imputación una de esas mujeres, Ornella G., arrestada el martes junto a su pareja cuando circulaban en una autopista a la altura de Orange (sureste) con sus hijos aparentemente en dirección a España.
La policía científica encontró sus huellas en el Peugeot 607 que se había preparado de forma rudimentaria como coche bomba y que las presuntas terroristas dejaron mal aparcado en el centro histórico y turístico de París.
Con Ornella G. (29 años) se encontraba el domingo de madrugada la propietaria del vehículo, Inès Madani, de 19 años y los investigadores tratan de determinar si la tercera persona vista es Sarah Hervouet, de 23 años.
Tanto Madani como Hervouet fueron detenidas el jueves por la tarde en Boussy Saint Antoine con una tercera mujer, Amel Sakaou, que las alojaba en su domicilio en esa localidad a unos 25 kilómetros de París.
Con información de EFE
