Este mismo lunes, a quien la justicia de Estados Unidos considera que se trata del testaferro, entre otros, del régimen venezolano de Nicolás Maduro, Álex Saab, comenzará a rendir testimonios ante un juez del Departamento de Justicia en Miami, Florida, quien lo acusa de lavado de capitales provenientes de la nación suramericana.
El Político
El arribo de Saab a Florida lo atienden los medios de comunicación de muchas partes del mundo. Entre ellos, la agencia de noticias española EFE adelanta que Sabb ahora deberá preparar las razones de su defensa ante la justicia de la nación norteamericana. El escenario será la sede de la corte del Distrito Sur de la Florida este lunes a 18 de octubre, a partir de la 1:00 pm, hora local. En tanto, los juristas defensores del empresario colombiano no han hecho más que fustigar al sistema judicial de la nación africana de Cabo Verde, que este sábado instruyó arrojarlo definitivamente de su territorio a bordo de un jeet estadounidense.
Nicole Navas, portavoz del Departamento de Justicia de Estados Unidos, significó su “admiración por la profesionalidad del sistema judicial” de Cabo Verde.
El empresario, no venezolano, oriundo del estado norteño colombiano de Barranquilla, ahora se obliga a responder por cargos federales estadounidenses que lo sindican de lavar recursos financieros calculados en US$ 350 millones. Estos, al parecer, provinieron de fraudes realizados al sistema de control cambiario en Venezuela con el consentimiento del régimen chavista.
La defensa del empresario colombiano Álex Saab, presunto testaferro del presidente venezolano Nicolás Maduro, que fue extraditado por Cabo Verde a Estados Unidos, considera "ilegal" la decisión del país africano. https://t.co/uPMbVVqLLP
— EFE Noticias (@EFEnoticias) October 17, 2021
Saab sin vuelta atrás ante el sistema judicial de EEUU
Algunos detalles están sobre la mesa que acusan a Saab. Principalmente porque entre noviembre de 2011 y septiembre de 2015 transfirió sus ganancias, consideradas ilícitas, desde Venezuela hasta cuentas bancarias privadas en EEUU. Se adiciona que en el transcurso de concretar esta gestión financiera, procuró el apoyo, entre otros, de un socio de nombre Álvaro Enrique Pulido, también empresario colombiano, su socio y también contratista y por tanto otro testaferro del régimen chavista.
Sobre la acusación que deberá encarar ante la justicia estadounidense, a Sabb se le sindican razones adicionales oscuras y corruptas. Entre ellas refrendadas en mayo de 2019 por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro. Concretamente por incurrir en graves delitos de corrupción.
Las acusaciones en general apuntan a que los negocios ilícitos de Saab fueron de gran escala, en contubernio con el chavismo. Y en general se relacionan con el desarrollo de programas alimentarios, llamados Clap, que han sido clave del mantenimiento del régimen venezolano. Así como la construcción de viviendas populares y hasta operaciones ilícitas de minas de oro explotadas ilegalmente y sin apoyo legal del sur de Venezuela.
En sus últimas instancias, los abogados de Saab insisten en señalar que con la extradición de Saab, se viola el principio denominado ne bis in ídem. El cual estipula que a alguien se le juzgue a alguien más de una vez por el mismo delito. Algo que sustentan diciendo que la Fiscalía de Ginebra, en Suiza, argumentó que no tenía pruebas de blanqueo de dinero contra Saab. Y que por tanto, los defensores sostienen que su extradición “constituye una flagrante ilegalidad y desacato a las normas del derecho internacional”.
Fuente: EFE