Las relaciones entre Colombia y Venezuela pasan por uno de sus momentos más amargos. Iván Duque y Nicolás Maduro se agreden permanentemente. Sin embargo, en paralelo hay y dos pueblos hermanos, que se apoyan mutuamente. Una relación que "estira y encoge".
El Político
Por una parte, la Federación Rusa es uno de los mayores compradores de petróleo del país caribeño. También mantiene una alianza estratégica, con dos bases militares en suelo venezolano.
Por otra parte, Estados Unidos mantiene activas una serie de sanciones sobre Venezuela. Sobre todo en el terreno económico, dichas sanciones afectan en gran medida, no solo al régimen de Nicolás Maduro, sino al ciudadano de a pie.
ÚLTIMA HORA | EEUU y Colombia emiten declaración conjunta sobre la crisis en Venezuela: “Nos comprometemos a apoyar el restablecimiento de la democracia para poner fin a la crisis política, económica y humanitaria” https://t.co/7fH6fMozyg
— AlbertoRodNews (@AlbertoRodNews) March 11, 2022
Colombia y EEUU
En cambio, las relaciones entre Colombia y EEUU son muy estrechas. Ambas naciones vienen haciendo un trabajo de acercamiento y de consolidación de relaciones.
Incluso, en dos oportunidades un buque hospital ha llegado hasta las costas colombianas, para brindar apoyo a los miles de desplazados que llevan desde Venezuela a territorio colombiano, en busca de una mejor calidad vida.
La emigración venezolana hacia Colombia ya ha alcanzado cifras sin precedentes. De acuerdo con estadísticas del Grupo Interagencial sobre Flujos Migratorios Mixtos, un millón 700 mil venezolanos han llegado a Colombia. Contabilizados hasta diciembre de 2021.
Iván Duque estableció un plan de ayuda y atención al enorme grupo de desplazados de Venezuela.
Duque asumió un gran costo político al apoyar a sus vecinos que huyen del régimen de Maduro. Pero fue más allá. Pidió que en otros país es de la región se replicase el programa de ayuda a los migrantes venezolanos.
Duque estableció una alianza con EEUU y otros países de la región. La idea central: desconocer el gobierno de Caracas.
Pero luego de tres años, la estrategia no dio los frutos esperados. Nicolás Maduro continúa en el poder y Colombia se ha quedado sola en su disputa.
Gustavo Petro
Colombia está en año electoral. Las encuestas dan al izquierdista Gustavo Petro como muy posible ganador, con amplio margen.
Esto tiene muy contento a Nicolás Maduro. Y es que Gustavo Petro respira el mismo oxígeno contaminado de la izquierda trasnochada del Foro de Sao Paulo.
De llegar Petro a la presidencia de Colombia, las relaciones con su vecina Venezuela podrían dar un giro dramático. Un golpe de timón en las relaciones con EEUU, que desbarataría todo lo construido hasta ahora.
El concierto de las sanciones
La guerra entre Rusia y Ucrania está generando cambios en la geopolítica del planeta. Caracas es uno de los mayores aliados de Moscú en Latinoamérica.
Una de las primeras reacciones para presionar a la Federación Rusa ha sido la imposición de un paquete de sanciones contra el Kremlin. Entre ellas un embargo petrolero.
Ahora la economía rusa comienza a verse comprometida en tiempo récord. Tanto EEUU como la Unión Europea hacen sentir a Moscú que fue un grave error haber invadido a Ucrania.
EEUU y Venezuela
En un insólito cambio de rumbo en las relaciones entre Washington y Caracas, la Casa Blanca se ha acercado al régimen de Maduro.
Recordemos que EEUU hace más de tres años rompió relaciones con Maduro. Reconoció al líder opositor Juan Guaidó como mandatario legítimo de Venezuela.
EEUU era el principal comprador de crudo venezolano. Pero las sanciones impuestas a Venezuela acabaron con esa bonanza.
Pero Joe Biden envió a Caracas una delegación para acercarse al régimen de Maduro. Una visita motivada por la necesidad de establecer nuevos acuerdos en materia energética.
Nicolás Maduro confirmó el acercamiento de ambas naciones. Lo calificó como una visita "respetuosa, cordial y diplomática". Pero no se reveló el fondo de la reunión.
Se especuló que en ese encuentro se tocaron temas energéticos. También se dice que el caso de los narco sobrinos fue un punto abordado.
Diplomacia a distancia
Estados Unidos nombró a James Story como embajador en Venezuela, en apoyo a Juan Guaidó.
Pero su oficina es una embajada virtual. Funciona desde Colombia, y Story reitera que EEUU se mantendrá como aliado de los venezolanos, quienes esperan que llegue un cambio político para Venezuela.
Así pues, Colombia y Venezuela ahora tienen un nuevo elemento en común: sus relaciones ahora "cordiales" con EEUU. Una surte de "estira y encoge" diplomático, de las relaciones bilaterales.
Grupos irregulares paramilitares también comparten hoy territorios de Colombia y Venezuela. Una realidad que ha convertido regiones de ambos países en tierra de nadie. Zonas donde la vida humana peligra día a día.
Naciones hermanas con una convivencia entre vecinos que va y viene, que se caldea y se calma. Una relación de amor y odio que puede cambiar de un momento a otro. Una especie de matrimonio, de alianza que "estira y encoge".
Una relación que varía según hacia dónde apunte el viento. Y el viento en Latinoamérica está soplando fuertemente hacia el izquierdismo trasnochado del Foro de Sao Paulo, hoy Grupo de Puebla.