La actividad era la habitual en la pequeña pero bulliciosa clínica, Hialeah Womans Care Center, poco más de una hora después que la Corte Suprema, tal y como se había anticipado tras la filtración de un borrador, emitiera su fallo eliminando el derecho constitucional de la mujer al aborto.
El Político
El fallo anuló un precedente de casi 50 años y pronosticó potencialmente el fin de la clínica que ha servido a Hialeah durante aproximadamente 40 años.
La clínica está en medio de un largo, viejo y colorido centro comercial con una cafetería hispana, una peluquería dominicana y un negocio de envíos internacionales. Además de abortos mediante píldora y quirúrgicos, ofrece servicios de control de la natalidad y análisis de laboratorio, reportó el Nuevo Herald.
Clínica de abortos en Hialeah
La sala de espera, adornada con paredes rosadas y engalanada con carteles de atención a la mujer, estaba en su mayor parte en silencio. La mayoría de las usuarias estaban sentadas solas en la fría sala, llenando formularios y distrayéndose con sus teléfonos mientras esperaban a que las llamaran.
Otras se sentaban con sus parejas en silencio. Una vez llamadas, las mujeres pasaban por una puerta blanca para ser asesoradas o tratadas, dependiendo de si era su primera o segunda visita.
La ley de la Florida exige que las mujeres esperen 24 horas después de una primera visita antes de poder abortar, lo que significa que las pacientes deben visitar al proveedor al menos dos veces.
DeSantis se pronunció sobre la ley
El gobernador de la Florida, Ron DeSantis, dijo el viernes tras el anuncio de la decisión que “trabajaría para ampliar las protecciones a favor de la vida”, pero no especificó qué implicaría eso.
Para aquellos como la mujer puertorriqueña en la sala de espera en Hialeah, viajar a otro estado, localizar un proveedor, pasar la noche, tal vez antes y después del procedimiento, sería una propuesta económica desalentadora.
“Ya es bastante difícil conseguir un aborto ahora, y probablemente lo van a hacer más difícil”, dijo la mujer, que pasó tiempo durante la semana llamando a las clínicas tratando de encontrar la cita más temprana. La mayoría le dijo que tendría que esperar lo que le pareció demasiado, así que se decidió por A Hialeah Woman’s Care Center, que acepta visitas sin cita previa.