La venta de chatarra es una alternativa del régimen venezolano, para evadir las sanciones, pero esa chatarra era infraestructura de PDVSA.
El Político
En efecto, el fiscal general designado por la extinta asamblea constituyente, Tarek William Saab, admitió el desmantelamiento de la estatal petrolera Petróleos de Venezuela, S.A. – PDVSA, para exportar chatarra.
Paradógicamente, el fiscal Saab dijo que los grupos dedicados a este flagelo: "merecen la máxima pena, pues el tráfico de material estratégico tiene la misma modalidad de las drogas".
Pero el régimen de Venezuela declaró la chatarra como "material estratégico" y la exporta a Taiwán, India y Turquía. Esto ha generado una red criminal, que dilapida los recursos de la estatal petrolera venezolana.
El régimen de Venezuela declaró la chatarra como «material estratégico» y la exporta a Taiwán, India y Turquía, lo que ha generado una red criminal que dilapida los recursos de la estatal petrolera venezolana https://t.co/1qhsAyYi2a
— Casto Ocando-Primer Informe (@cocando) April 19, 2023
Chatarra que no era chatarra
En medio de la —supuesta— operación anticorrupción que lleva adelante el régimen de Nicolás Maduro, contra un sector de poder dentro de PDVSA y otras empresas del Estado venezolano, fue incautada una impresionante cantidad de "material estratégico" o chatarra, que había sido robada de las instalaciones de la firma petrolera.
Diez camiones de carga de PDVSA fueron descubiertos por las autoridades del estado Anzoátegui —al noreste del país— y detuvieron a uno de los involucrados.
Se trata del desmantelamiento y saqueo de infraestructura de la petrolera, que no es otra cosa que un nuevo desfalco silencioso a PDVSA, de más de $2.000 millones. Aunque la cifra podría ser mucho mayor.
Diez vehículos de carga con "material estratégico" de la estatal PDVSA fueron incautados por autoridades en el estado Anzoátegui, durante un operativo en el que fue detenido uno de los involucrados, informó el fiscal general, @TarekWilliamSaab https://t.co/v7MfXL8ghm
— Banca y Negocios (@bancaynegocios) April 17, 2023
Sin restauración, todo está a la venta
La estatal petrolera PDVSA y otras empresas venezolanas han estado entre los vendedores de la supuesta chatarra.
Esto debido a que los nuevos proyectos se han estancado y la maquinaria ha envejecido, dijeron algunas fuentes a los medios, incluidos empresarios de varios sectores, transportistas, trabajadores y funcionarios gubernamentales.
"Hoy no se está restaurando nada, todo está a la venta", dijo una fuente, bajo condición de anonimato, por temor a represalias.
Se están desmantelando equipos en otras áreas petroleras, como en los estados Zulia y Anzoátegui, dijo otra fuente de la industria. Ninguno de los entrevistados especificó quién dentro de PDVSA está ordenando tales movimientos.
Pero con el auge del comercio de chatarra, algunas de esas ventas constituyen un robo total, según informes de la policía y la fiscalía.
Los camioneros que alguna vez trabajaron para compañías de petróleo o carbón dijeron a los medios que se han sentido cada vez más atraídos por el transporte de chatarra. Esto debido a que pueden ganar fácilmente 10 veces el salario mínimo mensual de Venezuela, que es de apenas $30.
#15Abr #Corrupción #Venezuela @TarekWiliamSaab: "En el Edo. Anzoátegui Fiscalias 4ta y 8va allanaron empresa donde fueron incautadas 10 Gandolas Cargadas de #MATERIALESTRATÉGICO pertenecientes a PDVSA". pic.twitter.com/BJNabLz8Np https://t.co/FoPNfx7wGG… https://t.co/FoPNfx7wGG…
— Reporte Ya (@ReporteYa) April 15, 2023
En resumen
"Todo el mundo está trabajando con chatarra. Antes no se veía eso, dijo otra de las fuentes consultadas, quien transportaba alimentos provenientes de Brasil, hacia varios estados de Venezuela. Pero desde diciembre labora en el transporte de chatarra.
En todo caso, la estatal petrolera venezolana, PDVSA, que alguna vez fue una de las principales industrias del ramo en el mundo, pasó a ser proveedora de chatarra.
Un negocio irregular y multimillonario, a expensas del desmantelamiento de infraestructura estratégica, al parecer, frente a la vista complaciente de algunas autoridades, que se benefician de ese nuevo desfalco a la nación suramericana.