Mucha gente se pregunta si Elon Musk, el polifacético dueño de empresas como Space X, Tesla, Twitter, entre otras, duerme. El dice que sí; "pocas horas pero plácidamente". Aunque ahora, como lo ha expresado entre amigos, "restringa esa necesidad por cuestiones de trabajo".
Mario Beroes/El Político
Pareciera que uno de los temas que, actualmente le resta horas de sueño a Musk es el robo de datos de la red social Twitter, y es este el motivo por el cual ha amenazado con demandar al gigante tecnológico Microsoft.
La demanda estaría basada, según Musk, en que Microsoft utiliza datos de Twitter para "entrenar ilegalmente".
Por qué es importante
La acusación del magnate no es del todo clara, ya que no especifica qué entrenó Microsoft con esta base, aunque podría suponerse que se refiere a la inteligencia artificial.
La posibilidad de demanda se produce luego de que Microsoft confirmara que eliminará a Twitter de su plataforma de publicidad.
La tecnológica dejará de usar Twitter en su multiplataforma, una característica de Microsoft Advertising que permite gestionar campañas de publicidad en redes sociales desde un solo lugar.
En la web de soporte se publicó un anuncio que indica que las campañas inteligentes de Multiplataforma no tendrán Twitter a partir del 25 de abril.
Esta funcionalidad requiere acceso a la API de la red social, por lo que Microsoft tendría que pagar $ 42.000 dólares al mes.
They trained illegally using Twitter data. Lawsuit time.
— Elon Musk (@elonmusk) April 19, 2023
¿Cuál es la verdad verdadera?
Elon Musk parece cosechar lo que siembra y la amenaza es una simple rabieta porque Microsoft se ha negado a seguirle el juego.
Desde hace unos meses, Twitter cambió las reglas de su API y anunció que cobraría por usarla.
En Microsoft sacaron cuentas y vieron que eso le costaba $ 42.000 mensuales por el esquema de suscripción más «barato», algo que no ocurrirá.
Tras conocer la decisión, Elon Musk no ha tardado en reaccionar del modo que mejor sabe. Un tweet bastante parco que puede leerse de muchas maneras fue suficiente para agitar las redes.
La acusación de robo de su base de datos no especifica si se refiere a Microsoft o directamente OpenAI, la empresa responsable de los modelos de IA que impulsan ChatGPT y otros productos.
Hace unos meses, Elon utilizó una estrategia similar cuando Apple confirmó que dejaría de anunciarse en Twitter.
El CEO cargó contra la empresa californiana amparándose en el uso de la libertad de expresión y el impuesto del 30%.
En uno de sus tweets indicó que Apple amenazó con retirar la app de Twitter de la App Store, aunque sin ofrecer pruebas.
Apple has also threatened to withhold Twitter from its App Store, but won’t tell us why
— Elon Musk (@elonmusk) November 28, 2022
Conclusión
Es muy pronto para saber si Elon Musk demandará a Microsoft, más cuando pareciera que su característica básica en las redes sociales es llamar la atención, o como dice el refrán: "De mi que hablen…bien o mal, pero que hablen".
Recordemos que el dueño de Twitter cambia de opinión todo el tiempo y sus tweets no siempre reflejan sus acciones.
Durante el juicio que se le sigue por manipulación de mercado, Elon buscó restarle importancia a sus publicaciones.
"El hecho de que tuitee algo no significa que la gente se lo crea o actúe en consecuencia".
Actualmente, el magnate se encuentra desarrollando una IA llamada TruthGPT, con la que buscará hacer frente a Microsoft y Google.
Contrario a la oferta de Bard y ChatGPT, Elon Musk quiere dar vida a una tecnología que busque la verdad máxima.
Para hacerlo realidad, el dueño de Twitter habría comprado miles de tarjetas gráficas con el fin de entrenar a un modelo utilizando la base de datos de la red social.