Este domingo 13 de agosto se llevan a cabo las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) para definir a los candidatos presidenciales que competirán en los comicios de octubre en Argentina. Pero los titulares de la semana, desde el pasado miércoles, fueron ocupados por la muerte de una niña de 11 años tras un robo y otros hechos violentos, así como la escalada de la inflación.
El Político
Finalmente, tras meses de campaña las diferentes fuerzas políticas dirimirá cuáles serán sus candidatos de cara a los comicios presidenciales del próximo 22 de octubre (hay 27 precandidatos inscritos). También se definirán los aspirantes para las elecciones legislativas y locales, como la de gobernador de la provincia de Buenos Aires o jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
El oficialismo presenta dos fórmulas: una encabezada por el ministro de Economía Sergio Massa y otra por Juan Grabois, que pertenece a la izquierda de la coalición peronista Unión por la Patria.
En la principal fuerza de oposición, Juntos por el Cambio, que se ubica del centro hacia la derecha en el espectro político argentino, también hay dos fórmulas. Sus precandidatos presidenciales son el actual jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, y la exministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich. Ambos tienen serias aspiraciones de llegar a la Casa Rosada y se han enfrentado duramente en campaña.
Hay otras dos cuestiones que definirán las primarias. Primero, cuánto respaldo tiene el relativo novato en política, el diputado Javier Milei, libertario en lo económico y conservador en lo social, que llega como único candidato de su movimiento La Libertad Avanza. Y, segundo, cuál de las dos principales fuerzas logra cosechar el mayor número de votos entre todos sus candidatos: ¿será Unión por la Patria o Juntos por el Cambio?
Elecciones marcadas por la violencia
Tres muertes conmocionaron al país durante lo que va del mes de agosto. El miércoles 09 en la mañana, mientras caminaba hacia su escuela en la localidad de Lanús, en la zona sur del conurbano bonaerense-la región de la provincia de Buenos Aires que linda con la Ciudad de Buenos Aires-, Morena Domínguez, una niña de 11 años, fue asaltada por dos hombres en una moto que le robaron sus pertenencias y la tiraron al suelo. Luego del robo, la niña quedó malherida y murió por los golpes.
Asi ocurre el ataque de las lacras a Morena de 11 años en ocasion de concurrir a su escuela. Los agresores son basura irrecuperable. #inseguridad #Argentina #Vergüenza #BASTA pic.twitter.com/tRaKCZDtTC
— ??????? ???? ???? (@AutorSara) August 9, 2023
Ese mismo día, hubo una manifestación de vecinos frente a la comisaría donde estaban detenidos los sospechosos del crimen. A pesar de que Argentina tiene cifras de homicidio bajas en comparación con la mayor parte de América Latina, existe una fuerte demanda social con respecto a la inseguridad, especialmente robos como estos, que son particularmente persistentes en zonas como donde fue atacada Morena Domínguez.
El crimen ocurrió en el último tramo de la campaña de cara a las PASO y varios precandidatos decidieron suspender sus actos de cierre por la muerte de la joven.
Está no fue la única muerte violenta en los días previos a las elecciones. El jueves 10 de agosto, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires reprimió una pequeña protesta –sin relación con el caso de Morena Domínguez– junto al Obelisco que se encuentra en el centro de la capital. Entre los manifestantes reprimidos se encontraba el militante de izquierda Facundo Molares, quien murió tras la intervención de la fuerza de seguridad. La autopsia deberá intentar determinar cómo y por qué murió.
Dólar imparable
La fuerte inflación que vive el país también es una realidad que puede cambiar el rumbo electoral.
Los ritmos de la economía argentina, la de los grandes números que maneja el Estado y las grandes industrias, pero también la de los ciudadanos de todos los estratos sociales y las pequeñas y medianas empresas, están fuertemente condicionados por el dólar, la moneda en la que muchos mantienen su ahorro en el país sudamericano y referencia que se observa en muchos casos para fijar y evaluar los precios de bienes y servicios.
Por eso, en Argentina el valor de la divisa sigue como si fuera una suerte de pronóstico del tiempo financiero. En estricto rigor, los precios del dólar. Por citar los más utilizados: el oficial, de acceso muy restringido y el más barato; los financieros, con ciertas restricciones de acceso por normativa y por complejidad de la operatoria para adquirirlos, y que hoy están al doble de precio que el oficial; y el paralelo o no oficial o ilegal o "blue", que se opera por fuera de los mercados formales, en billete, y que supera el doble del precio del oficial.
Con información de France24