Confiando en su regreso a la Casa Blanca, Donald Trump sigue dado detalles de cómo será su nuevo período presidencial y, como era de esperarse, el control migratoria encabeza su lista de cosas por hacer.
El Político
La presidencia de Donald Trump (2017-2020) se caracterizó por “volver a América lo que era” y para eso, el expresidente priorizó el control y reducción del número de inmigrantes asilados en el país.
Con rudas políticas migratorias, Trump logró poner orden en el país y “devolverle América a los americanos”.
Sin embargo, los esfuerzos del magnate multimillonario no valieron nada tras su salida de la presidencia y la llegada de la administración Biden.
Desde que Joe Biden tomó el control de la nación norteamericana, el país se ha visto hundido por la mayor crisis migratoria en la historia de los Estados Unidos.
Pese a los esfuerzos de los republicanos en el Congreso, las protestas por parte de los nacionalistas y las evidentes consecuencias negativas que la llegada de millones de indocumentados a traído al país; Joe Biden sigue sin priorizar la creación de nuevas y efectivas políticas fronterizas.
El regreso de Donald Trump
En medio de una rueda de prensa de campaña en Las Vegas, Trump habló acerca de cómo planea llevar sus primeros días en la presidencia, en caso de ganar las elecciones.
Y, como era de esperarse, los migrantes son sus principales rivales.
Para muchos, las fuertes políticas migratorias del expresidente representaron un éxito para la nación, por lo que su posible regreso entusiasma a todos estos estadounidenses que temen por su país y por el descontrol que hoy en día viven.
“A los pocos momentos de mi toma de posesión, comenzaremos la operación de deportación nacional más grande en la historia de Estados Unidos. No tenemos opción", dijo Trump en las Vegas.
Este comentario del candidato republicano causó sensación. Para algunos descontento y preocupación, para otros representó un aire de esperanza y control para la nación.
En un país ahogado por una cantidad, que se duplica diariamente, de indocumentados; este plan parece ser una oportunidad para retomar el orden.
“En lugar de luchar contra los estados fronterizos, usaré todas las medidas y la autoridad presidencial para defender a Estados Unidos de esta horrible invasión que está teniendo lugar ahora mismo”, agregó el republicano.
El expresidente, durante su discurso, también elogió al gobernador de Texas, Greg Abbott. Quien no ha permitido que el gobierno de Biden retire el alambre de púas en un corredor muy concurrido por los migrantes que ingresan a Estados Unidos sin autorización legal, según AP.