La líder opositora venezolana María Corina Machado ha hecho un llamado a la comunidad internacional para que tome medidas decisivas contra los aliados del gobierno de Nicolás Maduro.
En una entrevista con EFE, la exdiputada liberal subrayó que la comunidad internacional «tiene la corresponsabilidad» en la tarea de resolver «el problema global» que es Venezuela, por lo que pidió «a los pueblos del mundo que lleven sus voces y que presionen duro porque el momento de actuar es hoy».
Machado señaló específicamente varias entidades cuya influencia en Venezuela considera problemática:
– Gobiernos de Irán, Rusia y Cuba.
– Redes de narcotráfico.
– Organizaciones de crimen organizado internacional.
– Grupos extremistas como Hezbolá.
Machado instó a los gobiernos extranjeros, especialmente a Europa, Estados Unidos y América Latina, a pasar de las declaraciones conjuntas a las acciones concretas. Citando al Secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, enfatizó que es momento de "pasar de las ‘joint statements’ a las ‘joint actions'".
La líder opositora argumenta que la situación en Venezuela es un "problema global" que requiere una respuesta internacional coordinada. Machado hizo un llamado a los ciudadanos de todo el mundo para que presionen a sus gobiernos, afirmando que "el momento de actuar es hoy".
«El régimen tiene apoyos internacionales que tienen que ser (…) neutralizados por la comunidad internacional. Me refiero a Irán, Rusia, Cuba, a las redes del narcotráfico, del crimen organizado internacional, de los movimientos extremistas islámicos como Hezbolá, que todos sabemos que han operado en Venezuela», sostuvo.
Estas declaraciones se dan en un momento de alta tensión política en Venezuela, tras las controvertidas elecciones presidenciales del 28 de julio, en las que Maduro fue declarado ganador. La oposición, liderada por Machado, ha denunciado fraude electoral y busca apoyo internacional para desafiar los resultados.
Machado también advirtió al gobierno de Maduro que sería mejor negociar una transición antes del 10 de enero de 2025, fecha en que comenzaría el nuevo período presidencial, sugiriendo que la situación para el régimen podría complicarse significativamente después de esa fecha.