El ministro belga de Exteriores, Didier Reynders, se dijo este lunes "optimista" sobre que el pacto de libre comercio negociado entre la UE y Canadá (CETA) pueda recabar esta semana el respaldo necesario de su país para concluir su tramitación, tras el rechazo formulado por la región de Valonia.
"Soy siempre optimista, por naturaleza, sobre que pueda haber un acuerdo", aseveró Reynders a su llegada a un Consejo de Ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE), previo al que mañana celebrarán los titulares de Comercio para dar luz verde a la firma del tratado en una cumbre con Canadá que se celebraría el próximo 27 de octubre.
Reynders señaló que el pasado fin de semana continuaron las discusiones entre la Comisión Europea (CE), el Gobierno federal y las regiones en Bélgica.
"Vamos a seguir trabajando en ello para intentar lograr un acuerdo mañana o si no a finales de semana en la cumbre de líderes de la UE", comentó.
Para el ministro belga, "tenemos verdaderamente un acuerdo muy bueno, creo que sobre esa base podremos avanzar. Ésa es la posición del Gobierno federal de Bélgica".
"Hemos hecho todo con la Comisión Europea y el Gobierno canadiense para responder al conjunto de preocupaciones legítimas de los ciudadanos o los Parlamentos", recalcó el jefe de la diplomacia belga, al tiempo que indicó que el CETA es, "probablemente, el mejor acuerdo que jamás haya concluido la UE en el plano comercial".
El pasado fin de semana se celebraron reuniones técnicas entre representantes de la región belga de Valonia (mitad sur del país que representa a una población de unos 3.563.000 habitantes), el Gobierno federal y la CE, según la agencia Belga.
El Parlamento valón confirmó en una votación el viernes su oposición al proyecto de acuerdo comercial con Canadá y llamó a reabrir las negociaciones.
El ministro presidente de Valonia, Paul Magnette, criticó el "secretismo" con el que se llevaron a cabo las negociaciones del acuerdo, pero también los "débiles estándares en materia de respeto a los derechos socioeconómicos y medioambientales".
Desde un punto de vista "técnico", los ministros podrán adoptar las decisiones previstas para su Consejo de mañana sobre la conclusión, firma y aplicación provisional del tratado por mayoría cualificada, según fuentes comunitarias.
En cambio, precisaron que las decisiones de firma y conclusión "en la práctica requieren un acuerdo común, ya que todos los Estados miembros deberán firmar y ratificar el acuerdo".
Con información de EFE