El presidente de EE.UU., Barack Obama, ha lamentado el tiroteo registrado en Dallas este jueves en que ha confirmado que murieron cinco agentes de seguridad y un civil resultó heridos, según el rotativo británico ‘The Sun’.
El mandatario ha calificado lo sucedido en Dallas de "ataque vicioso, premeditado y despreciable contra la Policía". El líder estadounidense ha señalado que se trata de un "desgarrador recordatorio" del sacrificio que hace la Policía.
Obama también ha aludido a la cuestión del control de armas en EE.UU. al afirmar que los ataques a la policía podrían haber sido menos trágicos y mortales si quienes los perpetraron no hubieran llevado "armas potentes".
El presidente estadounidense se encuentra actualmente en Varsovia para asistir a la cumbre de la OTAN, pero está permanentemente informado sobre la situación en Dallas.
Los hechos
En la ciudad estadounidense de Dallas (estado de Texas) se produjeron en la noche de este jueves manifestaciones espontáneas para pedir justicia por los dos afroamericanos que esta semana fueron violentamente asesinados a manos de agentes de Policía.
Durante la manifestación se produjo un tiroteo en el que murieron cinco agentes de seguridad y seis policías resultaron gravemente heridos.
Según la información disponible, se cree que fueron al menos cuatro francotiradores quienes abrieron fuego contra las fuerzas de seguridad.
La agencia federal de aviación (FAA) de EE.UU. ha anunciado la restricción del espacio aéreo sobre la ciudad de Dallas.
En diferentes urbes del país fueron convocadas manifestaciones para rechazar los últimos casos de violencia policial.
La noche de este miércoles, Philando Castile, un afroamericano de 32 años, falleció en Falcon Heights (Minnesota) abatido por los disparos efectuados por un agente de policía que le había dado el alto porque su vehículo tenía un faro trasero roto.