Uno de los íconos por los que Uruguay se hizo conocido en todo el mundo durante el gobierno de José Mujica tropieza con problemas de distinta naturaleza, que hacen que, cuatro años y medio después de que la idea fuera lanzada, la marihuana legal aún no esté a la venta en las farmacias. Estos son seis obstáculos que tuvo el proyecto.
Transporte caro
Las medidas de seguridad que el gobierno exigía para la distribución de la marihuana hacia las farmacias generó desavenencias con las empresas que ganaron la licitación para producir. Los inversionistas no estaban dispuestos a costear un chofer profesional y un guardia armado, que era lo que pedía el Ircaa. Finalmente se decidió no incorporar el guardia armado.
Cantidad insuficiente
Otro de los problemas aparecerá en el momento en que los usuarios concurran a las farmacias a comprar. El gobierno había advertido que la marihuana que se produce será insuficiente para cubrir la demanda; un estudio de la Facultad de Ciencias Sociales de la Udelar lo confirmó. Se calcula que solo un cuarto de los que la consumen de forma habitual podrán adquirir el cannabis a través de los tres mecanismos legales: venta en farmacias, clubes canábicos y autocultivo.
Conflicto en El Correo
Según la Junta Nacional de Drogas, el registro de usuarios de cannabis estaba listo para entrar en funcionamiento a finales de setiembre, pero un conflicto sindical en El Correo pospuso la fecha en varias semanas. A pesar de que pasaron más de 15 días desde que se destrabó ese conflicto, la apertura del registro de usuarios aún no comenzó.
Bancos en problemas
En la mayoría de los países del mundo los bancos tienen prohibido operar con empresas que venden marihuana porque se trata de una actividad restringida por ser una droga ilegal. Eso puede perjudicar las relaciones que tienen los bancos establecidos en Uruguay con los del exterior.
Envase polémico
Uno de los grupos empresariales involucrados en la producción de marihuana estatal y el Ircaa mantienen desacuerdos por el tipo de envase que el gobierno entiende que es el más adecuado para conservar el producto una vez que se abre. La empresa no está dispuesta a asumir los costos que implica producir un envase de esas características y alega que en el mercado pueden encontrar contenedores más económicos.
Baja adhesión de las farmacias
En un primer sondeo realizado por el Centro de Farmacias, que nuclea a 300 comercios, había 26 interesados en vender cannabis. Ahora solo hay seis en esa lista. El motivo, según el Centro de Farmacias del Uruguay, se relaciona a la seguridad. Sin embargo, la venta estaría asegurada en todo el país porque el gobierno llegó a un acuerdo con una importante cadena de farmacias, anunció el prosecretario de la Presidencia, Juan Andrés Roballo, en octubre. No se ha dado más información al respecto.
Con información de El Observador