Según la agencia oficial, el general Akin Öztürk le admitió a la Fiscalía que “actuó con intenciones golpistas” en la sublevación militar. Estaba arrestado desde el sábado y en un primer momento había negado su participación.
Öztürk, detenido el sábado y trasladado este lunes al juzgado junto a otras dos decenas de generales bajo pedido de prisión preventiva, apareció visiblemente desmejorado y con un vendaje en la oreja derecha.
En un primer momento, se había informado que el ex comandante había negado toda implicación en el golpe.
Los medios turcos comenzaron a especular el domingo que Öztürk, máximo responsable de las Fuerzas Aéreas hasta agosto de 2015, estaba llamado a ser el nuevo jefe del Estado Mayor si la intentona golpista tenía éxito.
Tras abandonar la dirección de la Aviación militar en un relevo regular, el militar de 64 años se incorporó al Consejo Militar Supremo, el órgano castrense que determina, entre otras cuestiones, los ascensos y los pases a la reserva.
Necdet Özel, que hasta agosto pasado fue jefe del Estado Mayor, les aseguró este lunes a los medios de comunicación turcos que nunca observó que Öztürk tuviera intenciones golpistas, ya que, de haber sido así, lo habría destituido.
La policía ha detenido a 103 generales y almirantes de las Fuerzas Armadas turcas, bajo la acusación de haber estado involucrados en la intentona de golpe militar del viernes pasado.
Esta cifra representa casi un tercio de los 356 generales y almirantes que componen la cúpula de las Fuerzas Armadas turcas. Entre ellos se hallan los comandantes del 2º y 3º Ejército de las fuerzas terrestres.
Los militares están acusados de “conspiración para cambiar el orden constitucional por las armas”, “resistencia armada contra la autoridad”, “creación de una organización armada” y, en algunos casos, de “conspiración y realización de un ataque al presidente”.
Con Información de La Nación