Por segundo año consecutivo se celebró en la playa Brava de Montevideo el festival de surf inclusivo, una jornada que busca el disfrute de la playa y el deporte para discapacitados y que pone de manifiesto la falta de accesibilidad a la costa para estas personas.
"Falta una arquitectura más accesible en lo que es toda la costa, entonces estas actividades también ponen de manifiesto esa necesidad, y también congregan gente que está apostando a mejorar esa accesibilidad", dijo a Efe Ana Ortiz, promotora del proyecto "Soñando sobre las olas", que lleva a cabo esta iniciativa.
Por segundo año, el proyecto fue organizado conjuntamente por la Secretaría Nacional de Deporte, la Asociación Nacional de Guardavidas del Uruguay (ANGU) y la secretaría de Educación Física, Deporte y Recreación de la Intendencia de Montevideo, y congregó a más de 50 participantes, casi el doble que en la primera edición.
"El lema es surfear como uno: voluntarios, participantes, profesores, guardavidas… vamos todos corriendo en la misma ola, ayudando a la persona que pueda disfrutar, deslizar la ola hasta lo ultimo que quede", explicó Ortiz, también salvavidas y profesora de educación física.
Aunque el festival se celebró puntualmente hoy, el proyecto de surf inclusivo es una de las actividades de la Escuela de Mar del departamento capitalino y se desarrolla todos los sábados de enero y febrero.
Este programa ofrece la posibilidad de practicar surf a personas con discapacidad con la finalidad de contribuir a mejorar su calidad de vida, "mediante los aspectos terapéuticos que genera el deporte", según un comunicado de la Intendencia.
En este sentido, se busca "propiciar una instancia" que combine los "espacios de educación y recreación" y se disfrute de la playa a través de distintos juegos y la práctica de deportes.
Asimismo, la actividad se enmarcó en la campaña de prevención de ahogamientos de las autoridades.
"Lo que buscamos es que a través del surfing, los participantes, los alumnos y las familias aprendan cosas de prevención, a leer la playa, las señalizaciones y respetarlas", dijo Ortiz.
"Para nosotros la educación en prevención tendría que ser un derecho de todos en un país como el nuestro, como Uruguay, donde tenemos muchos espejos de agua de fácil acceso", concluyó.
Con información de EFE
