Una inmigrante salvadoreña con ocho meses y medio de embarazo y su abogada denuncian que los agentes fronterizos la llevaron a un hospital donde le dieron medicamentos para detener sus contracciones.
El Político
Acto seguido, la enviaron a esperar al lado mexicano de la frontera amparados por la política “Permanecer en México“.
La mujer embarazada había cruzado el Río Bravo para pedir asilo en Estados Unidos y esperaba dar a luz en cualquier momento.
Ahora ella y su hija de tres años viven en un campamento improvisado cerca del Puente Internacional de Matamoros, en el estado mexicano de Tamaulipas.
La abogada de la salvadoreña declaró que su clienta “le preocupa tener a su bebé en la calle o en un refugio". Según la letrada, casos como el de esta inmigrante ponen de relieve los peligros que puede implicar el programa “Permanecer en México”.
Esta política no destina a México a los solicitantes de asilo considerados “vulnerables” pero en esa definición no entran para CPB las mujeres embarazadas.
Fuente: La Opinion