El parlamento de Alemania ha aprobado un proyecto de ley que ha generado polémica al despenalizar la distribución y posesión de material de abuso sexual infantil (CSAM), reduciendo las sentencias mínimas y reclasificando el delito grave como un delito menor.
El Político
La medida, que ha sido objeto de discusión en la esfera política y social, ha sido informada por el sitio de noticias feministas Reduxx.
El proyecto de ley revierte una decisión de 2021 que clasificaba la posesión de pornografía infantil como un delito grave con una pena mínima de un año de prisión en Alemania, en línea con las directivas de la UE. Sin embargo, las nuevas normas van más allá al clasificar tanto la posesión como la distribución como delitos menores.
La justificación gubernamental para esta rebaja se centra en la situación particular de los sospechosos, que a menudo son adolescentes, y ocasionalmente incluyen a padres y maestros que descubren y comparten este material de manera involuntaria.
Según el proyecto de ley, esta rebaja es necesaria para permitir una respuesta más flexible a la gran proporción de delincuentes juveniles y a aquellos que actúan por impulsos típicos de la adolescencia.
Sin embargo, la oposición, representada por la Unión Demócrata Cristiana (CDU), ha denunciado la reducción general del rango de penas, argumentando que la distribución, posesión y adquisición de pornografía infantil deben seguir siendo clasificados como delitos. Consideran que los casos problemáticos mencionados en el proyecto de ley deben abordarse de manera más directa y específica.
Regulación pederasta en Alemania
Los grupos activistas a favor de la pedofilia, como Krumme-13 (K13), han celebrado la medida. Sin embargo, incluso entre ellos, hay críticas. Dietrich Gieseking, fundador de K13 y una figura controvertida, ha expresado su descontento con el gobierno por no disculparse con aquellos afectados por la ley de 2021 que convirtió la posesión de pornografía infantil en un delito grave.
Gieseking, quien ha enfrentado acusaciones previas de posesión y distribución de pornografía infantil, ha abogado abiertamente por la aceptación de la pedofilia en la sociedad. Ha argumentado que permitir que los pedófilos salgan del armario sin temor a la exclusión es una forma efectiva de prevenir el abuso infantil.
Este cambio legislativo ha provocado preocupación y debates intensos en Alemania y más allá. La medida, que desafía las normas sociales y legales establecidas, refleja la complejidad y la sensibilidad del tema de la pornografía infantil y el abuso sexual.
A medida que la sociedad busca un equilibrio entre la protección de los derechos de los niños y las consideraciones de justicia y prevención del delito, es probable que este tema continúe siendo objeto de controversia y debate en el futuro cercano.