El Gobierno alemán ha instado a Turquía a despejar cuanto antes las dudas sobre la limpieza del referéndum para la reforma constitucional celebrado el domingo en el país, mientras se repiten las denuncias por irregularidades.
El ministro alemán de Interior, Thomas de Maizière, hace esta exigencia en unas declaraciones que publica hoy el diario "Rheinische Post", en las que cuestiona que se pueda hacer una consulta durante un estado de emergencia.
"Ahora debe producirse una rápida aclaración para comprobar si el referéndum transcurrió de forma justa y limpia, en la medida en la que se pueda hablar de ello en las actuales circunstancias en Turquía", afirma.
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De esta forma se refiere a las limitaciones a las libertades impuestas por el Gobierno turco desde el intento de golpe de Estado del pasado julio, que el Ejecutivo alemán ha criticado en repetidas ocasiones por las purgas y los recortes a la libertad de prensa.
Además, De Maizière deseó que Ankara se "comporte razonablemente con el resultado del referéndum" y no busque que aumenten las tensiones en la sociedad turca.
El ministro de Interior pide asimismo a los turcos que residen en Alemania y a los turco-alemanes, que suman 3,2 millones de personas, que se involucren ahora "en un debate para un futuro común constructivo".
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En Alemania acudieron a las urnas el 51,2 % de los turcos con derecho a voto y el 63 % apoyo la reforma constitucional propuesta por el presidente, Recep Tayyip Erdogan.
En comparación, en el conjunto del país, el "Sí" a los cambios logró 51,4 % de los votos.
EFE
