Una discreta visita del enviado especial para asuntos de rehenes de Biden, Roger Carstens, a Caracas se registró esta semana. La presencia del alto funcionario en Venezuela encendió las alarmas sobre la posible liberación de Álex Saab.
El Político
Una fuente del Departamento de Estado de EEUU dijo a la Voz de América que seguirán «abogando por la liberación inmediata e incondicional de todos los ciudadanos estadounidenses detenidos».
En Venezuela hay ocho ciudadanos estadounidenses presos por delitos diversos. Dos, Airan Berry y Luke Alexander Denman son dos ex marines condenados a 24 años de prisión por la Operación Gedeón.
Fue un intento de copamiento mercenario para capturar al dictador Nicolás Maduro, en 2020.
Otro detenido es Hanid Ortiz Dahud, venezolano estadunidense, ex marine, preso por un triple crimen cometido en 2016 en Madrid.
La única mujer del grupo, Leslie Nereida Ortiz, está presa desde 2011 y condenada a 17 años por tráfico de cocaína.
La lista la completan Jerrel Lloyd Kenemore, Eylin Alexis Hernández, Jason George Saab y Joseph Ryan Cristella. Todos procesados por conspiración contra el Estado venezolano.
Familiares de Hernández, abogado en la defensoría pública de Los Ángeles, dijeron que se sienten «abandonados» por el gobierno de Biden.
Mientras versiones periodísticas aseguran que Kenemore está en huelga de hambre. Estos serían los dos casos que están primero en la lista de Carstens.
Fat Leonard
En el listado hay que agregar a Leonard Francis, conocido como «Fat Leonard» detenido en Maiquetía el año pasado, cuando intentaba viajar a Moscú tras violar su detención domiciliaria en EEUU.
Se había declarado culpable de cargos de soborno y fraude en 2015. Y estaba a punto de ser condenado cuando escapó. Leonard orquestó el mayor escándalo de corrupción en la historia de la Marina de EEUU.
El último dato conocido de la situación de Leonard en Venezuela es que pidió asilo, según reportó en su momento CNN.
Panorama general
No es la primera vez que un avión de la CIA aterriza en Caracas, como ocurrió a principios de semana. Sobre todo porque en Venezuela hay al menos cuatro ciudadanos estadounidenses tras las rejas.
Entre especulaciones y rumores, el Departamento de Estado confirmó este jueves que Roger Carstens, enviado presidencial especial para Asuntos de Rehenes de EEUU, fue quien viajó nuevamente a la capital de Venezuela.
Altos funcionarios le confirmaron a EL TIEMPO en Caracas que es falso que el enviado haya visitado Venezuela para canjear a Álex Saab, especulaciones que también surgieron por la visita, reportó ElNacional.
Si bien no se descarta que sea tema de conversación, pero la presencia de Carstens, que fue de unas tres horas, obedece a chequear el bienestar de sus ciudadanos.
“Podemos confirmar que el Enviado Presidencial Especial para Asuntos de Rehenes, Roger Carstens, viajó a Caracas para discutir sobre el bienestar y la seguridad de los ciudadanos estadounidenses detenidos injustamente en Venezuela”.
Así lo precisó un portavoz del Departamento de Estado a La Voz de América.
Phoenix Air Gulfstream III jet landed in Caracas, the jet is operated for the US government/CIA and is an indicator of a US official on a visit to Caracas#Venezuela https://t.co/Mm5fZPh1TQ
— CNW (@ConflictsW) June 19, 2023
¿Por qué es importante?
Según expertos en la materia, EEUU no debería utilizar a Álex Saab, el presunto testaferro de Nicolás Maduro, como pieza de canje por varias razones:
- Justicia y rendición de cuentas: Si Álex Saab está involucrado en actividades ilegales o corruptas, es importante que sea investigado y procesado adecuadamente. Utilizarlo como pieza de canje podría obstaculizar la búsqueda de justicia y la rendición de cuentas por parte de aquellos responsables de violaciones de derechos humanos o actos de corrupción.
- Independencia del sistema judicial: Utilizar a Saab como pieza de canje podría socavar la independencia del sistema judicial y debilitar la confianza en la imparcialidad de los procesos legales. Es fundamental que los casos sean tratados de manera justa y sin interferencia política.
- Lucha contra la corrupción: La corrupción es un problema grave en muchos países, incluido Venezuela. No utilizar a Saab como pieza de canje enviaría un mensaje claro de que EEUU está comprometido en la lucha contra la corrupción y no permitirá que los responsables escapen de la justicia.
- Credibilidad internacional: La comunidad internacional está observando de cerca la situación en Venezuela y cómo se abordan los casos de corrupción y violaciones de derechos humanos. No utilizar a Saab como pieza de canje ayudaría a mantener la credibilidad de EEUU y su compromiso con el respeto al estado de derecho y los derechos humanos.
En resumen
A principios de octubre, la administración logró liberar a siete estadounidenses: José Pereira, Jorge Toledo, Tomeu Vadell, Alirio Zambrano, José Luis Zambrano, Matthew Heath y Osman Khan.
Un posible intercambio de Saab no es descabellado, pero para eso, el escenario ideal es primero que la Fiscalía de Miami dicte sentencia al empresario barranquillero acusado de ser el testaferro de Nicolás Maduro.
Luego de la sentencia es que quizás se podría hablar de un canje, tal como ocurrió con los sobrinos de Cilia Flores.
Para Washington (al menos por ahora), Álex Saab es un criminal internacional de primer nivel que lavó cientos de millones de dólares mal habidos a través de bancos estadounidenses.
El presunto testaferro de Nicolás Maduro también es buscado por cargos de lavado de dinero en su Colombia natal y en Italia, donde su esposa de 26 años trabajaba como modelo.
Hasta su extradición a EEUU desde Cabo Verde en 2021, Saab, cuyo padre es libanés, también actuó como el hombre de dinero de Hezbolá en América Latina.
Así lo reveló Gulf News, un sitio de noticias en inglés con sede en los Emiratos Árabes Unidos.