El juez magistrado federal que autorizó la orden de registro de la propiedad de Donald Trump en Mar-a-Lago subrayó el lunes que "revisó cuidadosamente" las pruebas juradas del FBI antes de dar su visto bueno y considera que los hechos contenidos en una declaración jurada que la acompaña son "fiables."
El Político
Bruce Reinhart, juez de primera instancia, ofreció su evaluación en una orden de 13 páginas en la que memoriza su decisión de considerar si desvela partes de la declaración jurada, que describen las pruebas en las que se basó el buró para justificar el registro de la casa del ex presidente.
"Estaba -y estoy- satisfecho de que los hechos jurados por el declarante son fiables", dijo Reinhart en la orden y reportó Politico.
Juez ofreció su evaluación
Reinhart dictaminó la semana pasada que consideraría la posibilidad de desvelar partes de la declaración jurada tras consultar con el Departamento de Justicia y determinar si las redacciones propuestas serían suficientes para proteger la investigación penal en curso relacionada con el registro.
Sin embargo, en su orden, Reinhart subrayó que, en última instancia, podría estar de acuerdo con los fiscales en que las redacciones serían tan extensas que harían inútil el documento.
"No puedo decir en este momento que las redacciones parciales sean tan extensas que resulten en una divulgación sin sentido, pero puedo llegar a esa conclusión después de escuchar al Gobierno", escribió Reinhart.
Nueva orden
La nueva orden subraya la importancia histórica de una parte típicamente secreta del proceso de investigación criminal, y llega justo cuando Trump ha indicado que se está preparando para montar su propio ataque a la investigación del FBI en los tribunales.
El Departamento de Justicia debe proponer posibles redacciones antes del jueves, lo que augura un proceso potencialmente largo de negociación con Reinhart y posibles apelaciones.
En su orden, Reinhart señaló que "ni el ex presidente Trump ni ninguna otra persona que pretenda ser el propietario de los locales ha presentado un escrito en el que se pronuncie" sobre los esfuerzos para desprecintar la declaración jurada.
Reinhart también rechazó el argumento de que desvelar aspectos de la declaración jurada sentaría un peligroso precedente, dada la singular importancia histórica de este caso.