La directora de Amnistía Internacional (AI) para las Américas, Érika Guevara, denunció hoy en Buenos Aires que los Gobiernos de Latinoamérica están aplicando graves retrocesos en materia de derechos humanos escondidos en políticas de seguridad.
"Hay una agenda de seguridad que los Estados están imponiendo y que está generando un clima de violaciones a los derechos humanos de gran envergadura", aseguró hoy la activista durante una conferencia en la sede de la organización en Buenos Aires, donde repasó la situación de la región.
Guevara entendió que hay una tendencia generalizada en todo el continente de articular "retóricas de odio" que luego se convierten en políticas concretas de migración con una mirada de seguridad militarizada, y puso el ejemplo del reciente decreto que modificó la ley migratoria argentina en este sentido.
Para la directora regional de la organización, este "ambiente regresivo en materia de derechos humanos" atenta también contra pilares "fundamentales" que construyeron conjuntamente los Estados y la sociedad civil en las últimas décadas, como el sistema de derechos humanos.
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"Este sistema se enfrenta a una crisis política donde los Estados castigan lo que construimos para monitorear la aplicación de las normas nacionales e internacionales", lamentó Guevara, que recordó que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) fue durante años la "única oportunidad" de acceder a la Justicia genuina.
La estrategia de recortar fondos a la CorteIDH y de cuestionar su funcionamiento, que llevaron a cabo numerosos Gobiernos del continente, responde, según la activista, a una "intolerancia a la crítica" por parte de los Estados, que habla a su vez de un debilitamiento de su poder de representación social.
En este sentido, apuntó a la decadencia de la política tradicional, con Gobiernos votados, cada vez más, por minorías y líderes políticos que a su juicio no saben responder a los intereses de la mayoría, una ausencia que permite la entrada de otros actores como el poder económico, que acaban imponiendo sus intereses.
EFE