Los de Cupertino han decidido emprender acciones legales contra el fabricante de chips por dos motivos: la retención de un pago por esa cantidad (US$ 1.000 millones) que debía haberse entregado a principios de año y el incremento de royalties que está aplicando contra ellos.
La tecnológica presidida por Tim Cook presentó este viernes una demanda por valor de US$ 1.000 millones (unos 937,3 millones de euros) contra su proveedor Qualcomm. Alega que el fabricante de San Diego está monopolizando el mercado y que, gracias a sus patentes, ha logrado una posición privilegiada en el sector de la cuál está empezando a abusar.
En diciembre, Corea del Sur multó con 828 millones de euros a Qualcomm por prácticas contrarias a la libre competencia, incluyendo abuso de posición dominante para imponer unas cláusulas contractuales abusivas.
Con información de Expansión