Invocando presuntas irregularidades detectadas por varios organismos de control, el Ministerio de Energía ordenó rescindir un importante contrato con la empresa Odebrecht para realizar la segunda ampliación de gasoductos troncales. Según admitieron fuentes oficiales, la decisión va a derivar en un pago millonario a la compañía por resarcimiento, ya que ninguno de los jueces involucrados en el análisis de las presuntas irregulariades produjo un dictamen que dé soporte a la determinación oficial.
Se da así la paradójica situación de que el Tesoro argentino va a compensar económicamente a la constructora que en Brasil, su país de origen, está probadamente implicada en maniobras de corrupción investigadas en el marco del Lava Jato.
En despachos oficiales comenzaron a calcular cuánto se le debe a la firma por cuestiones propias del contrato mientras estuvo vigente (redeterminaciones de precios pendientes, costos asociados a la suspensión de obras, etc). Del análisis o negociación surgirá si también se le reconoce un eventual lucro cesante por abortar la relación contractual, tal como contempla el documento firmado hace 10 años.
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La firma del encarcelado Marcelo Oderbrecht resultó la única adjudicataria del denominado Open Season 2006-2008, plan diseñado por el ex Ministerio de Planificación, que en una década permitió reforzar el transporte troncal de todo el país en más de 15 millones de metros cúbicos por día.
El costo total de ese desarrollo es aún impreciso. Pero según sugieren las revisiones hechas hasta el momento, resultará muy superior a los 2.300 millones de dólares previstos originalmente. La primera ampliación de gasoductos es la que dio lugar al caso Skanska.
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Para la segunda etapa se pulieron las formas, pero también se basó en la constitución de un fideicomiso en el ámbito del Banco Nación, que debía ser nutrido con un cargo a pagar por usinas y grandes usuarios. Por diversas razones esto no siempre ocurrió, ese fondo terminó desfinanciado y las arcas públicas tuvieron que auxiliarlo con recursos propios.
Con información de La Nación