El mandato del colombiano al frente de la Unión de Naciones Suramericanas se venció esta semana. Algunos países lo ven inclinado al chavismo y otros dialoguista
La Unión de Naciones Sudamericanas acaba de esquivar lo que podría haber sido el principio de otro conflicto regional. El colombiano Ernesto Samper se quedará a cargo de la secretaría general de la Unión de Naciones Suramericanas hasta enero próximo por un acuerdo de los doce países de la Unasur. Su mandato se venció esta semana y la región pudo evitar con éxito un reflejo de la fuerte crisis institucional que atraviesa el Mercosur sobre todo por los desacuerdos en torno a Venezuela.
En esta decisión trabajada a todo vapor por la diplomacia sudamericana, la Argentina volvió a quedar en el medio de posiciones radicalizadas como lo que ocurrió en el Mercosur.
Presidente de su país entre 1994 y 1998, Samper es visto por distintos sectores como demasiado condescendiente con el gobierno de Nicolás Maduro. De hecho, la también radicalizada oposición venezolana ha manifestado fuerte recelo hacia su figura por su posición pro diálogo, que aún no ha dado resultados como tampoco las gestiones de ex presidentes como Martín Torrijos, de Panamá; Leonel Fernández, de República Dominicana; y José Luis Rodríguez Zapatero, de España.
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Según supo Clarín, los diplomáticos de la administración de Macri apostaron por el consenso mientras que -por ejemplo-, los paraguayos no simpatizaban con la idea de alargar el mandato de Samper, quien ya ha conversado hace unos meses con el presidente argentino. Otro frente que podía esperarse contra el colombiano podía venir desde el nuevo gobierno en Perú de Pedro Pablo Kuczynski. Pero al final no ocurrió.
Hubo sí negociaciones frenéticas y Samper quedará un tiempo más. De hecho, ni siquiera había candidatos para sucederlo. “El secretario general no solicita ni recibe instrucciones de ningún Gobierno, ni entidad ajena al organismo”, suelen decir desde su equipo. A su vez, siempre ha señalado que no busca postularse a otro mandato, de los dos años que dura. Samper es el cuarto secretario general de la Unasur, el primero fue Néstor Kirchner. Las diferencias sobre cómo abordar la grave crisis de Venezuela tras la llegada de nuevos gobiernos a la Argentina, Brasil y Paraguay reabrió latentes fisuras de una regionalización que era en realidad endeble.
Aunque finalmente integra el frente con Brasil y Paraguay que rechaza darle la presidencia automática del Mercosur a Venezuela, Argentina estuvo siempre en una posición intermedia a nivel jurídico. Entre brasileños y paraguayos más duros para con el régimen de Maduro y la alianza de los uruguayos con Caracas.
