El Político.- En septiembre de 2017 publicó el decreto Nº 3.085 que estableció una reducción a la alícuota del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y otorgó una rebaja del 3 % si la operación es hasta 2 millones de bolívares y del 5 % si la operación era mayor a ese monto, siempre y cuando la operación se realizara vía electrónica (transferencia, notas de débito y crédito).
Los comercios debieron adecuar todos los sistemas de facturación, tanto cajas registradoras, puntos de venta e impresora fiscal, de manera inmediata. Este trabajo trajo consigo una inversión de varias horas para las múltiples diligencias, se trató de una condición extrema para comerciantes, industriales y prestadores de servicio.
Comerciantes "contra la pared" entre pagos de salarios y la Sundde https://t.co/JHzBiIXFZB #ElPolitico pic.twitter.com/spno1eNt2s
— El Político (@elpoliticonews) January 8, 2018
A partir del 1 de enero de 2018, la aplicación de este decreto cesó y la alícuota del IVA se fijó nuevamente en 12% como valor único, para personas naturales y jurídicas.
Juan Pablo Pérez, consultor financiero y director de la Cámara de Comercio del estado Lara, comentó que la crisis de efectivo continúa porque no hay suficiente liquidez en el país y el cono monetario no está actualizado, “los billetes de 50 y 100 bolívares ya no valen nada”.
Considera que la medida de la reducción del IVA fue una solución visceral: “para cualquier trabajador que devengue o no sueldo mínimo es muy difícil adquirir bienes y servicios, solamente la base imponible ya es inalcanzable así que si el IVA es del 9% o del 12% no hace la diferencia, el problema es la hiperinflación”.