La organización que agrupa a bancos de Florida presionó por la exención a las sanciones de Estados Unidos que se emitió la semana pasada, dijeron el martes ejecutivos bancarios, bajo el argumento de que las medidas afectaban a clientes sin vínculos con el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
El Político
El pasado 5 de agosto la administración del presidente Donald Trump endureció las sanciones contra Venezuela al congelar los activos del gobierno del país sudamericano en Estados Unidos como una manera de buscar la salida de Maduro del poder.
Muchos venezolanos que se han establecido en Florida y algunos que residen en Venezuela tienen cuentas en instituciones financieras que están en ese estado estadounidense.
“Cuando salió eso (la medida) se creó un caos masivo aquí en el sur de Florida”, dijo a Reuters David Schwartz, presidente de la Asociación Internacional de Banqueros de Florida (FIBA).
Los bancos trataron de limitar su exposición al capital venezolano y restringieron el acceso de algunos clientes a las cuentas, mientras esperaban la orientación del Departamento del Tesoro para evitar entrar en conflicto con las sanciones.
FIBA escribió a la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), que implementa las sanciones, para pedir claridad sobre quiénes estaban cubiertos por las medidas de agosto y el 9 de septiembre la entidad eximió a exempleados y contratistas del gobierno de Venezuela, así como a ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes.
Daniel Gutiérrez, director del comité de antilavado de dinero de FIBA, dijo que fueron las peticiones de la organización sobre la medida del 5 de agosto lo que llevó a la OFAC a emitir la licencia de septiembre.
Un portavoz del Tesoro dijo que el departamento se involucra habitualmente con “asociaciones bancarias relevantes y partes interesadas de la industria” para garantizar la información que necesitan para cumplir con los programas de sanciones.
El episodio muestra cómo las crecientes sanciones de Washington han tenido consecuencias no deseadas porque bancos y otras instituciones han detenido operaciones que no están explícitamente prohibidas por las medidas, un efecto conocido como “cumplimiento excesivo”.
Fuente: Reuters