La Casa Blanca elaboró un informe donde explica que tanto Florida como otros 32 estados están en la ‘zona roja’, motivo por el cual sugirió aumentar medidas de mitigación en los condados donde se ha visto un repunte. Desde entonces el número de casos ha seguido aumentando y no se ha implementado ninguna medida para frenar la propagación,
El Político
Es de hacer notar que el informe, generado el grupo de trabajo de la Casa Blanca ante al COVID-19 fue compartido durante la última semana de octubre.
De acuerdo con The Center for Public Integrity, este grupo emite estos informes semanales, que son enviados a los gobernadores de cada estado, pero no se hacen públicos, según
El informe del 25 de octubre, obtenido y hecho publico por ese medio tiene también a la península en la ‘zona naranja’ por su tasa de positividad, que ha ido aumentando.
Continúa el repunte
Durante los últimos 21 días los casos en la Florida han repuntado. En promedio, el estado ha agregado alrededor de 87 casos más cada día desde el 16 de octubre.
En ese lapso también han aumentado las pruebas (alrededor de 200 más cada día), pero a una tasa mucho más baja.
Un dato a considerar es que las hospitalizaciones también han subido desde entonces. En Miami-Dade hay 109 personas más hospitalizadas este jueves que las que estaban hospitalizadas hace tres semanas, según los informes del condado.
Durante este mismo tiempo, el fallecimiento de residentes relacionadas con el COVID-19, reportadas diariamente, han bajado, según reportó miamimundo
El Departamento de Salud ha reportado alrededor de 2.5 muertes menos cada día durante las últimas tres semanas.
Sin embargo, cuando se ve un repunte en los casos, es normal que se vea también en las hospitalizaciones y las muertes entre a ocho semanas después. También es importante notar que las muertes no necesariamente ocurrieron el día antes que se reportaran. El Departamento de Salud ha dicho que reporta la muerte el día después que se reporta a ellos, pero hace unos meses médicos forenses advirtieron sobre una acumulación de más de 1,200 en todo el estado.
Como resultado, la Comisión de Médicos Forenses de Florida votó para simplificar el proceso al permitir que los médicos certifiquen las muertes por COVID-19 sin que los médicos forenses lo autoricen.
El alcance del retraso no está claro porque los médicos forenses ya no certifican cada muerte por COVID-19, pero profesores de Salud Pública locales están descubriendo que el reporte de las muertes suele retrasarse cinco semanas o más.
El análisis de el Nuevo Herald se limitó a solo las últimas tres semanas para excluir el 10 de octubre, cuando el estado no divulgó cifras de COVID-19 ya que había recibido datos duplicados de un laboratorio, informaron las autoridades entonces.
Otros datos del informe
El informe revela también que los condados Miami-Dade, Broward y Hillsborough fueron los que reportaron las mayores cifras de casos durante las últimas tres semanas de octubre, según el informe. Los casos nuevos en esos condados representan 31.1% de los casos nuevos del estado.
El reporte del grupo de trabajo también indica que se ve “deterioro a medida que se redujeron los esfuerzos de mitigación”.
Exactamente un mes antes de la fecha marcada en el informe, el gobernador Ron DeSantis ordenó que la Florida reiniciara completamente sus actividades, incluyendo bares, discotecas y clubes de desnudismo. También canceló la emisión de multas por no usar las máscaras.
Lo único que quedó igual fue el toque de queda de Miami-Dade, aunque enfrentó impugnaciones legales por la orden de DeSantis.
El grupo de trabajo recomienda que la Florida debe ampliar las medidas de mitigación “inmediatamente” en los condados donde están repuntando los casos.
También recomienda que las escuelas y las universidades sigan las guías de los Centros de Prevención y Control de Enfermedades (CDC).
La guía para las escuelas indica que los administradores pudieran decidir cerrarlas por un tiempo para desinfectar áreas donde pudo haber estado alguien enfermo. Aunque muchas lo han hecho, Desantis ha dicho que los administradores no deberían cerrar las escuelas, solo aislar a los estudiantes infectados