Servicios de inteligencia extranjeros instalaron programas malignos en los sistemas informáticos de la Oficina Meteorológica de Australia (BOM) para robar documentos sensibles y comprometer otras redes del Gobierno, según un informe oficial publicado hoy.
El informe, del Centro de Ciberseguridad Australiano (ACSC), aparece un año después de que las autoridades detectaran un ataque -que varios expertos atribuyeron a China- contra dos computadoras de esa agencia del Gobierno, que posee una de las redes informáticas más grandes del país.
La BOM proporciona información sensible a otras agencias gubernamentales como la red del ministerio de Defensa, que recibe datos meteorológicos cruciales para los vuelos de aviones militares y comerciales.
El informe señala que en los ordenadores de la BOM se encontraron herramientas de acceso remoto, populares entre ciberataques que cuentan con apoyo estatal, y que la seguridad de esos sistemas era insuficiente para prevenir ataques asociados criminales comunes.
"Se identificaron pruebas de que un adversario buscó y copió una cantidad desconocida de documentos de la red de la agencia (…) Es presumible que esa información haya sido robada por el adversario", añade el documento.
Hace un año varios expertos atribuyeron el ataque a los sistemas del BOM a China, que niega llevar a cabo ciberataques pese a que otros países como Estados Unidos también denuncian haber sido víctimas de estas prácticas por parte del país asiático.
El informe del ACSC indica que entre el 1 de enero de 2015 y el 30 de junio de 2016 el Centro de Ciberseguridad Australiano respondió a 1.095 incidentes de esta índole en los sistemas gubernamentales considerados lo suficientemente graves para responder a ellos.
Con información de: EFE