Las autoridades peruanas restituyeron hoy los restos de Luis Alberto Barrientos, asesinado hace 33 años por las fuerzas armadas, y una de las 110 personas ejecutadas y enterradas clandestinamente en el cuartel militar Los Cabitos durante el conflicto con Sendero Luminoso, anunció hoy la Fiscalía.
Los familiares de Barrientos recibieron sus restos óseos en una ceremonia celebrada en Huamanga, capital de la región Ayacucho, situada en el sur de los Andes peruanos, que estuvo encabezada por el presidente encargado de la Junta de Fiscales Superiores de esa región, Wilfredo Evangelista.
Al acto también asistió la fiscal superior nacional para casos de Terrorismo y Derechos Humanos, Luz Ibáñez, quien destacó que el caso de Barrientos es emblemático por ser el primero del expediente de "Los Cabitos" en llegar a juicio.
La fiscal precisó que Barrientos desapareció cuando tenía 18 años al ser detenido en su hogar por fuerzas combinadas del Ejército peruano y la Policía Nacional del Perú (PNP) en septiembre de 1983.
Miembros de las fuerzas armadas indicaron posteriormente a la madre de Barrientos que acudiera la comisaría de la zona para llevarle el desayuno, pero ella ya no volvió a saber nada más sobre el paradero de su hijo.
Las labores de recuperación e identificación de las víctimas del cuartel Los Cabitos, situado en Huamanga, comenzaron en 2005 a raíz del informe final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR) en el que se señalaba la existencia de un gran cementerio clandestino ubicado en ese lugar.
En el sector denominado La Hoyada se hallaron numerosas tumbas y se contabilizaron alrededor de 110 cadáveres, la mayoría de ellos calcinados, lo que dificultó su identificación.
Las pruebas de ADN permitieron identificar en un primer momento a cerca de seis víctimas el 19 de septiembre, pero para lograr el reconocimiento de los restos de Barrientos se tuvo que recurrir a otros métodos científicos porque su proceso fue más dificultoso, explicó Ibáñez.
La Asociación Pro Derechos Humanos (Aprodeh), que representa legalmente a los familiares de Barrientos, solicita que los responsables de los crímenes ocurridos en Los Cabitos reciban una sanción acorde al daño causado y recuerda que en ese cuartel fueron encontrados cuatro hornos de incineración.
Los acusados en este proceso penal son el excomandante general de las Fuerzas Armadas, Carlos Briceño; el exjefe del Estado Mayor Operativo, Carlos Millones; el exjefe del Estado Mayor Administrativo, Roberto Saldaña; y el exjefe del cuartel Los Cabitos, Humberto Orbegozo.
También son juzgados el jefe del destacamento de inteligencia de la llamada "Casa Rosada" en Ayacucho, Pedro Paz Avendaño, y el oficial de inteligencia del Ejército, Arturo Moreno, declarado reo contumaz, entre otros acusados.
El conflicto interno que enfrentó al Estado peruano con los grupos terroristas Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA), de ideología maoísta y marxista, respectivamente, dejó alrededor de 69.000 muertos entre 1980 y 2000, según el informe final de la CVR.
Con información de: EFE