La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, afirmó este sábado que el país está dando una batalla contra el fuego "sin pausa y sin precedentes" en la que participan más de 9.000 personas para extinguir los incendios que han calcinado ya casi 400.000 hectáreas y se han cobrado once víctimas fatales.
"Estamos combatiendo el fuego por aire y por tierra", señaló Bachelet en una comparecencia pública en la sede del Gobierno al finalizar una reunión con su gabinete de ministros.
La mandataria sostuvo que 46 aviones y helicópteros operan en las regiones afectadas por los incendios arrojando cerca de 980.000 litros de agua diarios sobre los principales focos.
Además, unos 4.500 bomberos y brigadistas chilenos y extranjeros y 4.600 militares trabajan en terreno, aunque se prevé la llegada de más voluntarios y la ampliación del contingente militar, que también ayuda a mantener el orden público, precisó la presidenta.
"El trabajo de los aviones y helicópteros, que humedecen y enfrían las zonas afectadas por los incendios, ha permitido a los voluntarios en tierra controlar en mayor medida el avance del fuego", subrayó Bachelet.
Al menos 34 personas procesadas por ocasionar incendios forestales en Chile
La capacidad para combatir las llamas aumentará en las próximas horas con la llegada al país de un avión cisterna ruso que puede cargar 42.000 litros de agua.
Bachelet confirmó que la aeronave, ofrecida por el Gobierno ruso, debería estar viajando rumbo a Chile, aunque el trayecto durará unas 32 horas.
La presidenta aseguró que la ola de incendios, la peor en la historia de Chile y que se extiende desde la región de Coquimbo a la Araucanía, es una "catástrofe inédita" pero recalcó que el país tiene "reservas y capacidades" para enfrentarla.
Además destacó la reacción de la ciudadanía, que se ha volcado en el apoyo a los damnificados con el envío de toneladas de ayuda.
"La población ha tenido un comportamiento ejemplar. Es un país solidario y eso nos hace tener la esperanza de que Chile se va a levantar todas las veces que sea necesario", apuntó.
Sobre el carácter intencional de algunos incendios, Bachelet reconoció que hay "algunos elementos raros" dado el explosivo incremento de los focos de incendios que se han registrado este verano austral en comparación con años pasados.
La Policía y el Ministerio Público están indagando las causas del fuego y, por ahora, no hay ninguna información que haga suponer que hay un grupo organizado detrás de los incendios, precisó Bachelet.
"Tenemos que evitar esas campañas que dan a entender que aquí hay una cosa muy orquestada porque hasta ahora no se ve esa tónica, pero no la descartamos", declaró.
Bachelet aclaró también que no hay ciudadanos extranjeros involucrados en el origen de incendios, como se dijo en las redes sociales, y pidió no difundir rumores.
Unas treinta personas han sido procesadas por presuntamente haber provocado incendios. Cuatro de ellas, en la región de O’Higgins, fueron dejadas en libertad por el juez, que consideró que no había pruebas suficientes en su contra.
Según el último informe de las autoridades, en Chile hay 135 incendios activos, de los que 71 están en fase de combate, 59 han sido controlados y cinco pueden considerarse extinguidos, con una superficie afectada cercana a las 400.000 hectáreas.
Con información de EFE