La lista de hitos históricos que produce el ascenso de Gustavo Petro y Francia Márquez es larga. Reflejo de un camino inexplorado que empezó este 7 de agosto, cuando el Pacto Histórico, la coalición petrista, asumió las riendas del Estado colombiano.
El Político
Desde la victoria electoral, el 19 de junio, los símbolos y celebraciones reivindicativas de una parte de la población que hasta ahora se sintió no solo subrepresentada en la política, sino abandonada por el Estado, han dominado el debate público.
Se habla de un acuerdo nacional por la vida y por la paz. Las expectativas son enormes, según reportes de la BBC.
Petro con complejas demandas sociales
Es probable que con el paso de los días el carácter histórico de la presidencia pase a un segundo plano. La manera como el gobierno busque cumplir las complejas demandas sociales, económicas y políticas concentrará la atención de los colombianos.
La vara que el mismo Petro se puso es, como él admite, tan alta que parece difícil de cumplir en cuatro años de mandato. Enfrenta, además, una sensible situación económica, un contexto internacional incierto y un persistente conflicto armado en algunas regiones del país.
Con 11,2 millones de votos, Petro es el candidato más votado de la historia. Pero por el otro candidato, Rodolfo Hernández, votaron 10,5 millones que estarán alerta a cualquier movimiento que consideren perjudicial. La oposición, si bien dividida tras las elecciones, promete una veeduría rigurosa a través del Congreso, la prensa y otras entidades estatales y no gubernamentales.
Solo el desempeño del gobierno permitirá saber si Petro y Márquez estuvieron a la altura de su propia condición histórica.
Una mirada a los hitos que significa su presidencia explica por qué las expectativas son tan altas.
Juro a Dios y al pueblo de Colombia cumplir firmemente la Constitución y las leyes de Colombia. pic.twitter.com/SUCojmAqdH
— Gustavo Petro (@petrogustavo) August 7, 2022
1. Primer presidente de izquierda
Hubo presidentes reformistas como Alfonso López Pumarejo en los años 30 o líderes populares que marcaron la política como Jorge Eliécer Gaitán en los 40, pero los cambios del primero fueron frustrados por una derecha reaccionaria, y al segundo lo mataron en plena campaña electoral.
Petro, como ellos, tiene una lectura crítica del modelo colombiano. Quiere reformar elementos sensibles como la propiedad de la tierra, la explotación de recursos naturales y los sistemas de pensiones, salud y educación.
Exguerrillero del M19, vehemente congresista que denunció la corrupción de la clase política y polémico exalcalde de Bogotá que peleó con todos los poderes existentes, Petro ha intentado moderar su figura durante la campaña y tras la victoria.
La pregunta que se empieza a responder este domingo es si el Petro de izquierda obsesionado con la ruptura será remplazado por un ecuánime constructor de acuerdos que busca un cambio gradual y moderado.
Una sociedad del conocimiento no es una utopía, llegó el momento de devolverle la deuda a la educación.#ComienzaTuGobierno pic.twitter.com/m4OjY6KQeE
— Gustavo Petro (@petrogustavo) August 7, 2022
2. Petro: El primer exguerrillero en el poder
La ausencia de dirigentes de izquierda en la Casa de Nariño se explica, en parte, por la guerra de guerrillas que inició en los años 60. La fobia por una agenda que sonara subversiva, la derechización de las Fuerzas Armadas y la alianza con Estados Unidos en plena Guerra Fría marcaron la política colombiana durante al menos 40 años.
Pero el país ha ido cambiando. Se firmó una Constitución avanzada en 1991, las diversas regiones se conectaron entre sí gracias a una revolución de infraestructura y las nuevas generaciones empezaron a pasar la página del conflicto armado, sobre todo después de la firma de la paz con las FARC en 2016.
Son cambios de fondo que generaron el espacio político para que un exmilitante de una guerrilla fuera presidente.
3. El primer gobierno que representa la diversidad de Colombia
Colombia tiene una de las poblaciones afro más grandes de América Latina. Sus regiones, además, tienen la biodiversidad de un continente entero. Pocos países en el mundo tienen una multiplicidad tan amplia de comunidades indígenas.
Pero la inmensa diversidad étnica, racial y geográfica de Colombia no había tenido una representación en el gobierno nacional. Hasta ahora.
La vicepresidenta, Francia Márquez, viene de una de esas regiones aisladas y discriminadas: el Cauca, en el suroccidente. Se hizo política por su activismo en contra de mineras multinacionales que buscaban explotar su tierra ancestral. Es negra y feminista. Fue empleada del servicio y madre soltera.
El perfil de Márquez, tan similar al de millones de mujeres, puso a los colombianos a hablar de racismo, clasismo y género durante la campaña. Temas ausentes en campañas anteriores que ahora marcaron la pauta.
Juro ante Dios, el pueblo de Colombia, mis ancestras y ancestros, respetar la Constitución y trabajar por los colombianos y colombianas que históricamente han estado excluidos, hasta que la dignidad se haga costumbre. #ElCambioEsHoy pic.twitter.com/A6f0kdBuu4
— Francia Márquez Mina (@FranciaMarquezM) August 7, 2022