Las relaciones de Estados Unidos con Israel, su principal aliado en el Medio Oriente, pudieran deteriorarse significativamente en un contexto de riesgos en la región. El impulso que el gobierno de Israel da al paquete de reformas judiciales que propone se ha convertido causa preocupación en Washington, según lo dicho por el portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby.
El Político
El funcionario precisó que el presidente Joe Biden transmitió al primer ministro israelí Benjamín Netanyahu las preocupaciones que "sigue teniendo". Estas inquietudes se centran en la referida reforma judicial y "actividades extremistas" por parte de miembros del gabinete de Netanyahu.
Biden probablemente se refería a algunos altos funcionarios israelíes ampliamente considerados "de extrema derecha" por sus ideas de mano dura contra los palestinos y expansión del territorio israelí. Entre ellos destacan el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el ministro del Interior, Itamar Ben-Gvir. Smotrich, por ejemplo, ha sugerido que soldados israelíes disparen a matar contra manifestantes palestinos que les arrojen piedras.
Sin embargo, Kirby Agregó que la conversación Biden-Kirby que ya ocurrió se insistió en la necesidad del diálogo entre ambos.
Ello cuando se avecina un encuentro entre ambos mandatarios. "El presidente Biden invitó al primer ministro Netanyahu a una próxima reunión en los EE.UU. El primer ministro respondió positivamente a la invitación y se acordó que los equipos israelí y estadounidense coordinarían los detalles de la reunión", informó en un comunicado la oficina del primer ministro de Israel. Así lo reseñó EFE.
Una nación sacudida
Mientras tanto, en Israel continúan las protestas multitudinarias contra los planes de Netanyahu para transformar el poder judicial. Con más de 28 semanas de tensión política, en varias ciudades israelíes como Tel Aviv, miles de personas se han plantado para rechazas el conjunto de reformas. De ser aprobadas, permitirían al gobierno controlar la selección de jueces, y al parlamento desconocer decisiones de la Corte Suprema.
La coyuntura política a lo interno para Netanyahu incluye una investigación por presuntos hechos de corrupción, por lo cual la aprobación de estas reformas podría suponer un parteaguas en el caso.
Por los momentos, Estados Unidos ha preferido mantenerse relativamente al margen, limitándose a gestos de preocupación como el que acaba de transmitir Biden. Para Estados Unidos sería muy problemático que Israel se vuelva un caos. O si la democracia israelí se deteriora al punto de que Washington no pueda seguir callando.
Se trata del aliado más importante Estados Unidos en el Medio Oriente y un compañero esencial en la causa por contener a un enemigo histórico conjunto: Irán. Justo ahora, cuando aumenta la tensión entre Washington y Teherán, al punto de que el primero decidió reforzar su presencia militar en la zona.