En una llamada telefónica, el jefe de la diplomacia EEUU, Antony Blinken, le exigió a su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, la liberación inmediata del periodista estadounidense Evan Gershkovich.
El Político
¿Por qué es importante?
El secretario de Estado informó que le transmitió su “grave preocupación por la inaceptable detención” del reportero Evan Gershkovich, quien fue acusado de espionaje.
Además de pedir su liberación, también pidió por la libertad del ciudadano Paul Whelan, sobre quien dijo que está “detenido injustamente”, reportó Infobae.
Por su parte, el ministerio ruso de Relaciones Exteriores indicó que “la parte estadounidense inició la comunicación”.
Según el reporte, Lavrov respondió que “la corte determinará” la situación del corresponsal.
El Departamento de Estado calificó la detención de Gershkovich como inaceptable.
I spoke with Foreign Minister Sergey Lavrov today to convey our grave concern over Russia’s unacceptable detention of a U.S. citizen journalist. I called for his release and for the release of wrongfully detained U.S. citizen Paul Whelan.
— Secretary Antony Blinken (@SecBlinken) April 2, 2023
Blinken y Lavrov también hablaron de “la importancia de crear un entorno que permita a las misiones diplomáticas llevar a cabo su trabajo”, según el Departamento de Estado.
En su resumen de la llamada, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia dijo que Lavrov mencionó a Blinken “la necesidad de respetar las decisiones de las autoridades rusas” sobre Gershkovich, de quien Moscú afirma, sin pruebas, “fue capturado in fraganti”.
Según el Kremlin, Lavrov también le dijo a Blinken que era inaceptable que los funcionarios estadounidenses y los medios de comunicación occidentales siguieran “generando entusiasmo” y politizando la detención del periodista. “Su destino futuro será determinado por el tribunal”, señaló.
We are deeply concerned over Russia’s announcement it has detained a U.S. citizen journalist. The @StateDept’s highest priority is the safety and security of U.S. citizens abroad. If you are a U.S. citizen living or traveling in Russia – please leave immediately.
— Secretary Antony Blinken (@SecBlinken) March 30, 2023
En contexto
El FSB, la principal agencia de seguridad de Rusia y sucesora de la KGB, dijo que Gershkovich estaba recopilando información de tipo militar-industrial.
El Kremlin aseguró, sin dar detalles, que Gershkovich fue descubierto "con las manos en la masa" y advirtió a Washington que no tome represalias contra los medios rusos en Estados Unidos.
El reportero de 31 años, reconocido por su rigor periodístico, fue detenido en Ekaterinburgo (a unos 1.800 kilómetros al este de Moscú) por sospechas de “espionaje”.
En una audiencia ante un tribunal de Moscú negó las acusaciones, según la agencia de prensa estatal rusa Tass.
El periodista estadounidense está en detención preventiva hasta el 29 de mayo, una medida que puede ser extendida en espera de un eventual juicio que podría acarrear una condena de hasta 20 años de prisión.
Según Tass, el asunto fue clasificado como “secreto”, lo cual restringe la publicación de información sobre el tema.
Previamente Gershkovich trabajó para la agencia AFP y el diario Moscow Times y fue asistente de prensa para The New York Times.
El delito de espionaje está castigado en Rusia con penas de entre diez y 20 años de prisión, según el artículo 276 del código penal.
En resumen
Se cree que Gershkovich es el primer periodista extranjero detenido por espionaje en la Rusia postsoviética, y se espera que su detención aumente el enfrentamiento del Kremlin con Occidente en medio de la guerra de Moscú en Ucrania.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, en respuesta a la exigencia de la redacción de que se expulse a todos los periodistas rusos, declaró que “el periódico puede decir eso, pero no debería ocurrir. No hay ninguna razón para ello”.
Lo cierto es que el arresto por espionaje de un periodista extranjero no tiene precedentes en la historia reciente de Rusia.
El presidente Joe Biden reclamó el viernes a Rusia liberar al reportero. “Déjenlo ir”, lanzó Biden al responder preguntas de reporteros en la Casa Blanca.
Por su parte, el Wall Street Journal, que dijo estar "profundamente preocupado por la seguridad" de Gershkovich, negó las acusaciones contra su reportero y solicitó su "liberación inmediata".
La ONG Reporteros sin Fronteras (RSF) se declaró "alarmada" por "lo que parece ser una medida de represalia". "¡Los periodistas no deben ser objeto de ataques!", afirmó.
Más de 30 organizaciones de prensa y defensores de la libertad de prensa han escrito al embajador ruso en EEUU para expresar su preocupación por que Rusia esté enviando el mensaje de que informar dentro del país está penalizado.