El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, inició un proceso de reestructuración de los ministerios de su Gobierno con lo cual concluye la primera etapa de todo gobierno que suele ser de conocimiento y transición.
El Político
Bolsonaro se enfoca ahora en profundizar su proceso de privatizaciones, pero no descarta el área social, con la cual está en deuda y constituye uno de sus lados más frágiles.
Hasta el momento, el presidente Bolsonaro destituyó a Gustavo Canuto titulr del ministerio de desarrollo regional, el quinto cambio ministerial que hace desde que asumió la presidencia hace poco más de un año.
Este Ministerio dirige entre otras actividades el programa Mi casa, mi vida creado en el 2009 como parte del proceso de dar a poyo a las personas mas vulnerables.
De este modo responde Bolsonaro las críticas recibidas desde el Parlamento que expresan tardanza y lentitud en el desarrollo de esta iniciativa. Sin embargo, Canuto, especialista en informático era demandado para presidir la empresa del Estado que coordina la seguridad social que coordin las pensiones de vejez y presenta severos retrasos en la atención a personas mayores que esperan su jubilación, aspecto muy delicado y que Bolsonro logró reformas importantes en este sector.
Por Canuto asumió el ministro de economía Rogerio Marihno y en el lugar que ocupaba Marinho entra en la Secretaria Especial de Providencia y Trabajo, entra Bruno Bianco, atual secretario-adjunto.
Bolsonaro cambió en primer lugar al ministro de educción de origen colombiano Roberto Vélez por Abraham Weintraub en Educación, donde ha iniciado reformas.
Marinho tiene buenas relaciones con el fuerte parlamento de Brasil, y tendrá un ppel protagónico tras el inicio del nuevo período de sesiones este mes.
En concreto, Bolsonaro pretende cambiar al jefe del Gabinete de la Presidencia y al de Minas y Energía, Onyx Lorenzoni, y Bento Albuquerque, respectivamente, según ha recogido ‘Folha de Sao Paulo’. En cuanto a Lorenzoni, se ha desgastado desde que comenzó el mandato de Bolsonaro.