Al menos siete personas han muerto y otras veintitrés resultaron heridas en bombardeos del régimen sirio en la localidad de Deir Qanun, en el valle del río Barada, que nutre de agua a Damasco, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
En el comunicado, la ONG añadió que entre los heridos hay varias personas que se encuentran en estado grave, al tiempo que agregó que el balance de muertos podría aumentar.
El Observatorio indicó que los enfrentamientos continúan entre el grupo chií libanés Hizbulá, respaldado por las fuerzas fieles del presidente sirio, Bachar al Asad, y las facciones rebeldes e islamistas que se encuentran en la localidad de Ain al Fiya, donde se encuentra el manantial que abastece a Damasco de agua potable.
Las fuerzas gubernamentales continúan avanzando hacia esta localidad y la de Kafir al Zeit, en las afueras de la capital siria.
Durante el día de ayer, cinco pueblos, entre ellos se encuentra Deir Qanun, izaron la bandera nacional siria.
La tensión continúa en la zona del valle del río Barada, pese a la aplicación de un pacto entre las partes para permitir el bombeo de agua a la capital, donde no hay suministro desde el valle desde el pasado 23 de diciembre.
Igualmente, este ataque se produce el mismo día que se ha dado a conocer el asesinato del líder de la comisión de negociaciones del Gobierno sirio que media con los rebeldes en el valle del río Barada, identificado como Ahmed al Gadbán, por un grupo armado desconocido, según el Observatorio.
El Ejército sirio no ha detenido su ofensiva en el valle del Barada a pesar de la tregua que entró en vigor el pasado 30 de diciembre, alegando que en la zona opera el Frente de la Conquista de Levante, la antigua filial siria de Al Qaeda, grupo excluido del alto el fuego por Damasco.
EFE
