El presidente de la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) Corporación, Eduardo Paz, informó que Brasil expresó su interés de comprar energía a Bolivia.
Paz señaló que el vecino país nuevamente en los últimos días expresó su interés de comprar energía a Bolivia y subrayó que lo hizo primero con el Gobierno de Dilma Rousef y ahora con el de Temmer.
“Tienen la urgente necesidad de incorporar alrededor de 7.000 megavatios (MW) por año, para garantizar su consumo interno y su crecimiento de demanda", dijo Paz.
El funcionario indicó que de manera oficial el ministro de Energía y Minas del Brasil, como el presidente de Eletrobras, expresaron su interés específico en el proyecto hidroeléctrico Río Madera, que es un proyecto binacional que tiene estudios que están muy avanzados.
Paz explicó que los costos de producción que maneja ENDE son muy competitivos con relación a los precios que se manejan en la región y por eso también existe el interés por parte de Brasil.
El presidente de ENDE puntualizó que desde la nacionalización el Gobierno ha planteado la necesidad del cambio de la matriz energética, tanto de energía solar donde se generará más de 130 MW y una generación similar en energía eólica, con financiamiento asegurado y que hasta el primer trimestre de 2017 serán firmados los contratos de ejecución.
Energía complementaria
El vicepresidente del Banco de Desarrollo de América Latina CAF, Hamilton Moss, afirmó que en Bolivia la energía hidroeléctrica es renovable y, además, es almacenable en tiempos de demanda de energía creciente no solo interna, sino en la región y tienen la característica de ser complementaria con la energía solar, fotovoltaica, eólica o geotérmica.
Moss explicó que las energías alternativas son energías que se complementan ya que no es posible que una sola pueda satisfacer las necesidades de los sistemas, por tanto se deben diversificar ya que dependen de las condiciones climáticas.
El funcionario sostuvo que en la implementación de los proyectos hidroeléctricos o geotérmicos en un inicio las inversiones son fuertes; sin embargo ya en su etapa de operación y funcionamiento estos costos se abaratan.
Con información de El Deber