El conservador François Fillon atacó a uno de sus principales rivales a las en las presidenciales francesas del 23 de abril, el neocomunista Jean-Luc Mélenchon, al que calificó de "nostálgico" del régimen comunista de Cuba y de Fidel Castro.
"Mélenchon es un nostálgico de Cuba y de Fidel Castro. Yo prefiero al general De Gaulle", dijo el exprimer ministro Fillon en un mitin celebrado en Lille, en el norte de Francia.
Lea también: Presidente de Francia advierte peligro de extremismos
El candidato de la izquierda radical respondió en su intervención en Dijon, en el centro de Francia, y pidió al electorado francés el voto para impedir que Fillon destruya "500.000 puestos de funcionarios" que aniquilarán el Estado francés.
Fillon y Mélenchon han ganado terreno en las últimas semanas y están prácticamente empatados en los sondeos, con una intención de voto que ronda el 20 %, muy cerca de los todavía favoritos el socioliberal Emmanuel Macron y la ultraderechista Marine Le Pen, con apoyos entre el 22 % y el 23 %.
"Dicen que soy un tirano", prosiguió el candidato izquierdista, pero "soy el único que propone un referéndum para revocar" a cargos públicos.
Fillon, que mantuvo su candidatura a pesar de estar bajo investigación desde el marzo pasado por malversación de fondos públicos, criticó el aumento del gasto público que incluye tanto el programa de Mélenchon como el de Le Pen.
"Nuestro país ya tiene diez años de atraso, con sus programas será un siglo de atraso el que tendremos", alertó el candidato conservador, que prometió cortar en un 8 % los gastos del Estado en cinco años.
Tanto Fillon como Mélenchon mostraron también sus visiones divergentes sobre la Unión Europea (UE).
El exprimer ministro se definió como un "soberanista en favor de una Europa soberana" en la que se debe reforzar la zona euro, mientras que el eurodiputado Mélenchon censuró duramente la actual configuración de la UE.
Lea también: Presidente francés reitera llamado de cese al fuego en Ucrania
"Tenemos un deber moral respecto a toda la humanidad. La Unión Europea no puede ser solo un mero aparato de contabilidad", dijo, en alusión a los tratados presupuestarios que fijan un techo en el gasto de los Estados miembros. EFE