Victoria judicial para un padre de Canadá. Robert Hoogland, cuya hija nació mujer, pero asegura sentirse varón, logró salir de la prisión en la que estuvo encarcelado durante los dos últimos meses.
El Político
Hoogland consiguió que, tras revisar su condena, la Corte de Apelaciones le concediera libertad plena. El tribunal también removió la multa de 30.000 dólares a la que fue sentenciado en primera instancia.
El hombre, oriundo de la Columbia Británica, fue juzgado por no autorizar la el procedimiento de cambio de género de su hija.
En concreto, el progenitor se negó a permitir que su hija fuese tratada con hormonas masculinas. Robert Hoogland se rehusó, además, a referirse a ella como si se tratase de un varón.
Tras ser llevado a juicio, el magistrado a cargo del caso dictaminó que el padre no tenía derecho a oponerse al cambio de género de la adolescente de 15 años. En consecuencia, le prohibió hablar sobre tal tema de manera pública.
Hoogland desacató la orden del juez y, como castigo, se le penó con seis meses de prisión y con el pago del dinero.
Ahora, tras recuperar su libertad, Robert Hoogland ha asegurado que se trata de “una gran victoria”. El progenitor también consideró que su caso “lo que hace es sentar un precedente”.
“Lo que querían era un verdadero elemento de disuasión para los padres, especialmente cuando se oponen a la agenda trans (género)”, comentó el hombre.